Alemania sufrió el mayor ataque informático de su historia, que afectó a cientos de políticos, incluida la canciller Angela Merkel y a otras numerosas figuras públicas, como artistas y periodistas, informó el Gobierno germano, que lo calificó de un acto “grave” contra las instituciones democráticas.

Los hackers, todavía no identificados, no difundieron datos políticamente sensibles del Gobierno pero sí publicaron parte de la correspondencia de Merkel, así como comunicaciones de otros políticos.

Las redes del Gobierno, por lo que se sabe hasta ahora, no se vieron afectadas, indicó la Oficina Federal para la Seguridad Informática (BSI).

Los partidos fueron informados del ataque, según los medios de prensa alemanes e iniciaron sus propias investigaciones.

La ministra de Justicia, Katarina Barley, calificó de “grave” lo sucedido y advirtió de que los autores sólo pretenden socavar la confianza en las instituciones democráticas. (I)