Centrales nucleares en riesgo por réplicas
La Agencia de Seguridad Nuclear de Japón informó ayer que revisará las medidas de seguridad de las centrales nucleares del país tras la crisis de Fukushima y el impacto de las réplicas sísmicas en otras plantas, como la de Onagawa (noreste).
La central de Onagawa, en la provincia de Miyagi y la más cercana al epicentro del seísmo de 9 grados del 11 de marzo, soportó ese día vibraciones en sus instalaciones un 10% superiores al nivel para el cual los reactores 1 y 3 estaban diseñados.
Además, el pasado 7 de abril una fuerte réplica de 7,1 grados cerca del primer epicentro hizo que el reactor de Onagawa sufriera una fuerza de 5,6% superior a la de sus especificaciones de diseño. En esa ocasión una pequeña cantidad de agua radiactiva rebosó desde sus piscinas de combustible.
Las autoridades gubernamentales revisarán las centrales del país, que en la costa noreste han tenido que detener sus operaciones y algunas han sufrido cortes temporales del suministro eléctrico de sus sistemas de refrigeración.
De su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aconsejó crear sistemas de vigilancia sanitaria, debido a la radiactividad desatada en algunas zonas del país tras el accidente nuclear en la central de Fukushima.