El Gobierno de Venezuela rechazó ayer las acciones de los regímenes de derecha de Argentina, Brasil y Paraguay, que acusan al Gobierno Bolivariano de un supuesto incumplimiento de la normativa del Mercado Común del Sur (Mercosur) en relación con el traspaso de la presidencia pro témpore.

A través de un comunicado emitido por el Ministerio para Relaciones Exteriores venezolano, el Gobierno reiteró su repudio “a la invención de una fraudulenta tesis, sin soporte en derecho, de un supuesto vacío en la presidencia pro témpore; que ejercemos legalmente a partir del día 29 de julio del corriente, con sus deberes y derechos, tal como fue oportunamente comunicado a los Estados partes”.

Asimismo, en el texto se alerta sobre la intención de “reeditar una suerte de Operación Cóndor contra Venezuela, que hostiga y criminaliza su modelo de desarrollo y democracia”.

El Plan Cóndor fue un sistema de represión coordinado entre dictaduras del Cono Sur durante 1970 y 1980.

La canciller venezolana, Delcy Rodríguez, rechazó también una reunión de coordinadores planteada por Argentina a sus socios del Mercosur, con el fin de zanjar las diferencias para que el país petrolero asuma la presidencia del bloque.

La ministra venezolana dijo que le “preocupa cómo la canciller argentina (Susana Malcorra), que pretende ser secretaria general de las Naciones Unidas, irrespeta tratados internacionales”.

El pasado viernes, Uruguay dio por concluida su gestión en la presidencia rotativa del Mercosur, sin anunciar el traspaso del puesto a ninguno de los socios del bloque.

El puesto le correspondía a Venezuela, de acuerdo con el orden alfabético de los miembros del grupo, pero Paraguay y Brasil se oponen por la crisis política de esa nación. (I)