Un "brexit" sin acuerdo podría provocar 12.400 muertes más por cardiopatías
Un "brexit" sin acuerdo podría provocar unas 12.400 muertes más en la próxima década en Inglaterra por cardiopatías y enfermedades cerebrovasculares, según un estudio publicado este lunes 28 de enero en la revista BMJ Open, versión online del "British Medical Journal".
El análisis, a cargo de expertos de la Universidad Imperial College de Londres, justificó el aumento de las muertes por ese tipo de patologías a la posible reducción de ingesta de frutas y verduras por parte de los británicos por el aumento de los precios derivado de las salida de la Unión Europea.
Un 84 % de la fruta que se consumió en el Reino Unido en 2017 fue importada, así como un 48 % de la verdura, y el coste de estas transacciones se incrementará significativamente después de la salida del Reino Unido de la UE, indicaron los responsables del informe.
Los investigadores analizaron cuatro posibles escenarios del "brexit" y concluyeron que el más perjudicial sería el de una salida sin acuerdo, que causaría más de 12.000 fallecimientos por enfermedades cardiovasculares en la próxima década.
Sus cálculos mostraron que una salida abrupta del bloque comunitario provocaría el mayor incremento en el precio de estos productos importados, por ejemplo de los plátanos que costarían un 17 % más, las frutas cítricas un 14 % y los tomates casi un 15 %.
La ingesta de frutas y verduras en más de la mitad de la población británica ya se encuentra por debajo de los niveles recomendados, pero esta caería aún más de darse ese divorcio con la UE, agregaron.
Los británicos comerían un 11,4 % menos de frutas y alrededor de un 9 % menos de verduras, lo que derivaría en ese aumento de muertes que ascenderían a unas 12.400 más entre 2021 y 2030, un incremento de aproximadamente el 2 %.
"La política comercial post-"brexit" podría hacer aumentar el precio y reducir la ingesta" de estos alimentos saludables, de tal manera que "aumentaría la mortalidad por enfermedades cardiovasculares", insistieron en el estudio.
"El Gobierno británico debería considerar cuidadosamente las consecuencias en la salud de la población en las próximas negociaciones del "brexit", particularmente, los cambios adversos en los sistemas alimenticios", concluyeron. (I)