Brasil y Estados Unidos aproximaron posturas hoy en sus relaciones de defensa, en una reunión entre los ministros del ramo, Celso Amorim y Leon Panetta, en la que se abordaron los contratos millonarios de compraventa de aviones que interesan a ambos países.

El secretario de Defensa de EE.UU., Leon Panetta, quien está realizando una gira por la región que incluye escalas en Colombia y Chile, valoró el liderazgo "global" de Brasil.

"Brasil es una potencia global, una fuerza positiva para la estabilidad no solo de las Américas, sino del mundo entero", dijo Panetta, en la rueda de prensa posterior a la cita.

La reunión fue la primera que se realiza del llamado comité binacional de cooperación en asuntos de defensa, cuya creación fue acordada hace tres semanas en Washington entre los presidentes de EE.UU., Barack Obama, y de Brasil, Dilma Rousseff.

Amorim afirmó que presentó propuestas para alcanzar acuerdos de colaboración que implicarían la transferencia de tecnología bélica al país suramericano.

El ministro precisó que Brasil no demanda la donación de tecnología, sino el "acceso" a esos medios, a la vez que manifestó su interés en dialogar cuestiones "más amplias" en el área de seguridad y defensa.

Sin entrar en detalles, Amorim señaló que en la reunión se trataron cuestiones bilaterales de interés que "todos saben", en clara alusión a las negociaciones para vender a EE.UU. 20 aviones de combate ligero de la brasileña Embraer y también a la participación de Boeing en una licitación abierta por Brasil para la compra de 36 cazas.

El pasado febrero Boeing suspendió la compra de los 20 aviones Súper Tucano por supuestos problemas en la documentación de la propuesta de Embraer, después de que presentara una queja la perdedora de la licitación, la estadounidense Hawker Beechcraft.

El contrato de 355 millones de dólares, adjudicado el último diciembre, tenía como objetivo utilizar los aviones de Embraer, que disponen varios sistemas tecnológicos estadounidenses, para misiones de entrenamiento, operaciones de reconocimiento y de apoyo aéreo en Afganistán.

Brasil también mantiene en suspenso la resolución de la licitación para comprar los cazas, en la que participan los Súper Hornet F/A-18 de Boeing, los Rafale de la francesa Dassault y los Grippen de la sueca Saab.

Estados Unidos, al igual que el resto de los candidatos a la licitación, ofreció a Brasil la cesión de la tecnología en el caso de que elija sus aviones.

Coincidiendo con la visita de Rousseff a Washington, Embraer y Boeing firmaron un acuerdo de cooperación en investigación y desarrollo industrial.

Al margen de los contratos de compraventa de cazas, Panetta y Amorim indicaron hoy que el recién creado comité de cooperación en asuntos de defensa deberá de centrarse este año en las actividades de asistencia humanitaria y respuesta a desastres naturales y también en la cooperación y apoyo a naciones africanas.

El comité también tratará la seguridad cibernética y el apoyo a las autoridades civiles en la celebración de grandes eventos.

Brasil organizará el próximo junio la conferencia de Desarrollo Sostenible de la ONU Río+20, el año que viene recibirá las Jornadas Mundiales de la Juventud, en la que se espera la asistencia del Papa, y también acogerá el Mundial de fútbol de 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016.

En la próxima escala de su gira latinoamericana, Panetta realizará mañana un discurso en la Escuela Superior de Guerra de Brasil, en Río de Janeiro, en el que tratará sobre la colaboración militar de ambos países.

El secretario estadounidense después realizará una ofrenda floral para rendir honores a los soldados brasileños fallecidos en la Segunda Guerra Mundial.

Panetta tiene previsto visitar Chile entre el jueves y viernes, en la última etapa de su gira por la región, que inició ayer en Colombia. EFE