Venezolanos dejan Brasil y empiezan su retorno
Unos 80 venezolanos que vivían como refugiados en Roraima, estado fronterizo en el norte de Brasil, regresaron este sábado 9 de septiembre a su país en autobuses fletados por Venezuela. Debido a la tensión generada por el linchamiento que sufrió el jueves un inmigrante acusado de haber asesinado a puñaladas a un brasileño.
La repatriación fue coordinada por autoridades consulares de Venezuela en Brasil, que ofrecieron los autobuses a quienes quisiesen regresar por libre y espontánea voluntad a su país, admitieron algunos de los inmigrantes que aceptaron la propuesta.
Los inmigrantes que regresaron a su país vivían en viviendas improvisadas con maderas y plásticos en una barriada pobre de Boa Vista, la capital del estado de Roraima y que se ha convertido en el principal destino de los venezolanos que ingresan a Brasil para huir de la crisis económica, política y social de su país.
A pocos metros de allí precisamente, José Rodríguez, de 21 años, fue golpeado en la cabeza hasta la muerte con objetos contundentes. Él había sido acusado por seis hombres, de asesinar a puñaladas a un brasileño.
El incidente agravó el clima de tensión y de hostilidad, y ocurrió diez días después de que el presidente de Brasil, Michel Temer, anunciara la movilización de 3.200 soldados para reforzar la seguridad en la región fronteriza y en Boa Vista, tras una ataque de parte de la población local contra campamentos de inmigrantes venezolanos.
Desde Perú también emprendieron su regreso. Alrededor de unos doscientos venezolanos retornarán en un avión financiado por el gobierno de Nicolás Maduro, sobre todo para los migrantes que decidieron volver. Allí hay más de 414.000 venezolanos, de acuerdo a sus autoridades migratorias.
El primer vuelo denominado “Vuelta a la patria” fue abordado el 28 de agosto por 89 retornantes. Otro similar partió desde Ecuador el miércoles con 92 migrantes más.
Según las Naciones Unidas, más de 1,6 millón de venezolanos han salido de su país desde inicios de 2015 y 90% de ellos se han quedado en Sudamérica. (I)