En medio de intentonas destituyentes y en el marco de un ajuste de las cuentas públicas, el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff publicó este lunes un decreto que amenaza con detener el funcionamiento del Estado, ya que bloqueó unos $ 2.800 millones del presupuesto 2015 para cumplir con la meta fiscal, razón por la cual la mandataria canceló su viaje oficial a Vietnam y Japón previsto para esta semana.

La falta de aprobación del Congreso del déficit fiscal de 2015 llevó al Poder Ejecutivo a publicar un decreto este lunes que paraliza los gastos públicos, lo cual puede llevar, con el correr de los días, al cese de la cadena de pagos en los niveles federal, estatal y municipal.

El miércoles pasado iba a tratarse en el Parlamento el asunto de la meta fiscal, pero la sesión se canceló debido a la detención del senador Delcidio Amaral, del Partido de los Trabajadores, en el marco del escándalo de corrupción de Petrobras.

DATOS

La economía brasileña, la séptima del mundo, se contrajo 1,7% en el tercer trimestre del año en relación al trimestre anterior, más de lo esperado y profundizando la recesión iniciada este año.

La economía del país se contrajo, asimismo, 4,5% de julio a septiembre en relación al 3T de 2014, el mayor retroceso desde que comenzó la serie histórica hace 19 años, precisó el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).

El mercado proyecta un retroceso del PIB de 3,19% este año y de 2,04% en 2016. Si se confirman los dos años consecutivos de recesión, sería la primera vez que esto ocurre en 85 años, desde 1930.

La caída del PIB en este 3T estuvo liderada por el retroceso en el sector agropecuario
(-2,4%), la industria (-1,3%) y los servicios (-1%).Además, fue preso el banquero André Estévez, muy cercano al senador Aecio Neves, candidato presidencial opositor derrotado por Rousseff en 2014 y que impulsa el juicio político de la Mandataria.

Estévez, mientras el PT y la izquierda denunciaban la investigación segmentada del escándalo, tenía acceso al expediente que está bajo secreto de sumario.

En esta crisis política, el Gobierno espera que el bloqueo a las cuentas públicas sirva para que el Congreso finalmente autorice el déficit y así cumplir con exigencias del tribunal de cuentas.

El decreto suspende todos los gastos corrientes no obligatorios, que no están incluidos en la Constitución, como la compra de equipamientos y obras públicas, energía, agua, teléfono y alquileres, además de los contratos de servicios tercerizados.

“El Gobierno no tenía opción, estamos caminando para un bloqueo de cuentas grande”, dijo Fabio Silva, del Consejo Federal de Economía, al opinar sobre el decreto, inédito, que reemplaza a la anterior planificación que sí había aprobado el Congreso.

En ese marco, los jinetes del juicio político en contra de la presidenta Dilma Rousseff continúan cabalgando para salvar la iniciativa. Por eso el estruendo que causó la detención del senador Delcidio Amaral apenas se escucha en las filas oficialistas.

Amaral fue grabado por Bernardo Cerveró, hijo de Néstor Cerveró, exdirector de Petrobras que negoció un acuerdo de delación premiada.

Amaral dice en la filmación que el banquero André Estévez, del banco BGT Pactual, la décima fortuna de Brasil, pagaría una fuga vía Paraguay para Cerveró hacia España. Amaral, antes de pasar al PT en 2003, fue funcionario de Petrobras en 2000 y 2001, en la presidencia de Fernando Henrique Cardoso y allí trabajó con Cerveró.

Estévez es el primer gran banquero preso, no por el juez Sergio Moro, a quien el PT acusa de investigar en forma parcializada el escándalo, sino por el Supremo Tribunal Federal.

En este marco, entre los papeles del banquero Estévez se encontraron documentos que, según la Policía Federal, apuntan a pagos de sobornos por unos $ 15 millones a Eduardo Cunha, el opositor presidente de la Cámara de Diputados investigado por lavado de dinero y corrupción para impulsar leyes promovidas por el sector financiero.

El momento crítico de las cuentas públicas para el Gobierno llega con un alivio parcial para la presidenta Dilma Rousseff por parte de la encuestadora Datafolha, que indicó que la popularidad de la mandataria aumentó, al reducirse del 71% al 67% en noviembre su imagen negativa, respecto de septiembre.

El país está en recesión y, según los analistas, se espera que el PIB de 2015 sea de una caída del 3,2%. Brasil registró en noviembre su noveno superávit comercial consecutivo y sumó $ 1.197 millones, prácticamente el único indicador positivo de la economía del gigante sudamericano. (I)