La Guardia Costera interceptó este jueves una barcaza procedente de Libia con 500 inmigrantes de origen subsahariano a bordo, cuando se encontraba a unas 20 millas al sur de la isla italiana de Lampedusa.

Según informaron  fuentes de la Guardia Costera, entre las personas que viajaban en la embarcación había 39 mujeres, dos de ellas embarazadas, y nueve niños.

Tras ser auxiliados en alta mar, los indocumentados fueron trasladados a Lampedusa en lanchas de las autoridades italianas.

La llegada de estos inmigrantes se suma a la de otros 208 la pasada madrugada a bordo de una nave que también había partido de Libia y que alcanzó la isla italiana por sus propios medios, después de casi una semana sin que se registraran desembarcos en la zona.

Las últimas llegadas de las que se tenían constancia se produjeron el 13 de mayo, cuando 1.214 inmigrantes que viajaban en seis embarcaciones procedentes de Libia alcanzaron las costas de la isla.

Por otro lado, los medios de comunicación italianos informan hoy de la localización de los cadáveres de tres inmigrantes frente a Trapani, en la isla de Sicilia.

Se cree que estas personas formaban parte de un grupo de 17 indocumentados que viajaban a bordo de una lancha neumática y que fueron obligados a tirarse al mar por quienes manejaban la embarcación para escapar a los controles de las autoridades italianas.

Los otros catorce lograron llegar a nado a las costas de Sicilia, donde fueron interceptados por la Policía.