Autoridades electorales y la oposición revisan rúbricas para el referendo revocatorio
Almagro insiste en activar Carta Democrática en Venezuela, pese a resolución de la OEA
La canciller venezolana Delcy Rodríguez catalogó ayer como una victoria de su país ante la Organización de Estados Americanos (OEA) el respaldo al diálogo entre el Gobierno y la oposición con el acompañamiento de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Contrario a la pretensión del secretario general de ese organismo, Luis Almagro, de invocar la Carta Democrática, ese grupo acordó el miércoles apoyar los diálogos en los que intervienen como mediadores los expresidentes de República Dominicana, Leonel Fernández; de Panamá, Martin Torrijos, y el exjefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero.
En su cuenta en la red social Twitter, la diplomática también agradeció a los países de la región que respaldan el Estado de Derecho en Venezuela, su plena soberanía y la democracia constitucional.
La canciller comentó que solo el Gobierno de Paraguay se apartó del consenso en apoyo al diálogo que impulsa Unasur. Alabó además que la victoria en ese organismo continental constituye un reconocimiento al Gobierno constitucional del presidente Nicolás Maduro, así como al sistema democrático de promoción de derechos humanos.
Sin embargo, tras el llamado al diálogo, Luis Almagro insistió ayer en su petición y urgió al Consejo del organismo a poner fecha a una sesión urgente para determinar si el país sufrió una alteración del orden constitucional. “Hoy más que nunca urge fecha reunión Consejo OEA para abordar Carta Democrática #Vzla #DemocraciaEnVzlaYA”, escribió Almagro en su activa cuenta de la red social Twitter.
El titular de la OEA también saludó que los 34 países de la organización abordaran este miércoles “la crisis de Venezuela” por primera vez desde 2014, cuando Panamá quiso llevar las protestas sociales contra el Gobierno del presidente Nicolás Maduro cediéndole una silla a la diputada opositora María Corina Machado, acto que Caracas rechazó.
El jefe de la OEA ha pedido convocar una sesión extraordinaria entre el 10 y el 20 de junio para que los Estados se pronuncien sobre si, como él, consideran que en Venezuela hay “una alteración del orden constitucional que afecta gravemente al orden democrático” y, en consecuencia, votan proseguir con el proceso de la carta.
El exembajador de Venezuela ante la OEA, Roy Chaderton, por su parte, consideró que ese organismo necesita un respirador artificial, además de recuperar algo de dignidad, por lo que le sugirió a Luis Almagro renunciar.
“Después del papelón que hizo y los regaños que recibió de los embajadores, debería presentar su renuncia, aunque lo entiendo, son 20 mil dólares mensuales, más HCM (seguro) y la posibilidad de concluir su mandato con una carta de residencia en los EE.UU.”, comentó.
“Sería muy digno que renunciara, ya perdió toda autoridad, sobre todo cuando pretendió igualarse a un Jefe de Estado como Nicolás Maduro”, apuntó el diplomático.
En tanto, el Consejo Nacional Electoral y la coalición de partidos de derecha Mesa de la Unidad Democrática (MUD) tenían previsto reunirse ayer para revisar la fase de digitalización de las rúbricas para la activación del referendo revocatorio del mandato de Nicolás Maduro, que promueve la oposición, pero la reunión fue suspendida. (I)
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Los pueblos defienden conquistas
Los indígenas se movilizan contra intervencionismo
Las calles de Caracas se llenaron ayer de las tradiciones ancestrales de los pueblos indígenas, quienes manifestaron su apoyo a la Revolución Bolivariana, que desde 1999 ha reivindicado sus derechos.
En medio de cantos, bailes, y consignas los representantes de los pueblos ancestrales elevaron sus voces para celebrar las conquistas sociales alcanzadas gracias a las políticas implementadas por el Gobierno Bolivariano.
La ministra para los Pueblos Indígenas, Clara Vidal, señaló que esta muestra de patriotismo constituye una manifestación popular de respaldo al proceso revolucionario, “que ha sido el único que ha reivindicado los pueblos y comunidades indígenas en todo los sentido, en materia educativa, en materia de salud, en materia de alimentación productiva, y en materia política”.
En los últimos 17 años los pueblos originarios han logrado la demarcación de hábitat y vivienda indígena, la incorporación de sus propios voceros en las diferentes instancias de los poderes del Estado, la incorporación en programas sociales, el acceso a la educación gratuita y el reconocimiento de los idiomas indígenas como idiomas oficiales.
La multitud, que se concentró desde tempranas horas en la Plaza Santa Teresa, en el centro de Caracas, para marchar hacia el Palacio de Miraflores, expresó su rechazo de las acciones impulsadas por la derecha venezolana y respaldada por el Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, quien intentó aplicar la carta democrática de ese organismo para atentar contra la soberanía de la nación.
Por su parte, Franyelica Pérez, quien es originaria de la etnia Kariña, que habita en el estado Anzoátegui, garantizó la lealtad de los pueblos indígenas venezolanos al proceso revolucionario que inició el comandante Chávez y que ahora lidera el presidente Nicolás Maduro, quien ha dado continuidad a cada una de las políticas de inclusión que impulsó el líder bolivariano para el bienestar de las clases menos favorecidas.
“Para nadie es un secreto que los pueblos indígenas vienen desarrollando desde hace muchos años, desde nuestro ancestros, una lucha en contra del imperio, contra la derecha burguesa que intentó despojarnos de nuestras tradiciones, y nos sometió a la exclusión y la explotación. Por eso es que seguiremos luchando con más fuerza y convicción, en defensa de nuestra patria junto a nuestro presidente Maduro”, sostuvo.
En la actividad también participó el alcalde de Vargas, Carlos Alcalá Cordones, quien indicó que los pueblos indígenas están “rodilla en tierra, fortaleciendo la Revolución bolivariana”. (I)