Luciana García Nores, una de las hijas de Alan García, expresidente de Perú, dio a conocer este viernes 19 de abril una carta que su padre escribió a sus seguidores, en la cual afirma que no quería sufrir “la injusticia” de ser detenido por el caso Odebrecht.

El exmandatario, que se suicidó antes de ser detenido por presuntos actos de corrupción dentro de la investigación, relató que daba por satisfecha su misión de político y gobernante de su país.

La lectura de la misiva se realizó en el velatorio en la llamada “Casa del Pueblo”.

En su carta, García, quien gobernó Perú en los períodos 1985-1990 y 2006-2011, señaló que creía que “conducir el aprismo al gobierno en dos ocasiones” fue “la misión” de su existencia y por ese motivo sus adversarios “optaron por la estrategia” de denunciarlo más de 30 años, pero “jamás encontraron nada”.

Añadió que “en este tiempo de rumores y odios repetidos que las mayorías creen verdad he visto cómo se utilizan los procedimientos para humillar o vejar y no para encontrar verdades”.

El ataúd con el cuerpo del exmandatario recorrió el centro histórico de Lima antes de ser trasladado a un cementerio en las afueras de la capital, donde fue cremado en una ceremonia privada.

El exgobernante se disparó en la sien el miércoles 17 de abril cuando miembros de la Policía llegó a su domicilio a detenerlo, en el marco de las investigaciones por el presunto pago de sobornos en el caso Odebrecht.

Actualmente, tres expresidentes peruanos están detenidos por su vinculación con la compañía brasileña.

La trágica muerte de García atrajo multitud de mensajes de pésame, conciliación y respeto hacia su figura, pero al mismo tiempo desprecios y negativas de sus partidarios que acusan al actual gobierno de persecución política.

Esa fractura tiene como líderes simbólicos por un lado al Ministerio Público y fiscales, como José Domingo Pérez, encargado de perseguir los delitos de corrupción cometidos por la empresa Odebrecht, y que es respaldado por el presidente Martín Vizcarra, quien abrazó la lucha anticorrupción como política de Estado.

Simpatizantes tienen accidente

La madrugada del viernes 19 de abril, siete personas murieron y más de 40 resultaron heridas luego de que un autobús, que trasladaba a militantes apristas al sepelio del expresidente Alan García, se volcara en la carretera.

Fuentes del Partido Aprista Peruano (PAP) y de la Policía peruana informaron que el percance del autobús ocurrió a 154 kilómetros de Lima, en la provincia de Huacho, y provenía de la ciudad de Piura.

El congresista aprista Jorge del Castillo confirmó la noticia por redes sociales y expresó el dolor de la agrupación por esta nueva tragedia que golpea al partido.

De acuerdo a las autoridades, el conductor del autobús se habría quedado dormido y chocó con el muro de contención de un puente.

Los sobrevivientes relataron que por el impacto las personas que viajaban en el piso superior del autobús salieron disparadas hacia el río y la carretera, lo que complicó las labores de rescate de la policía y los bomberos. (I)

Los casos
Primer mandato  
Después de concluir el primer mandato abrieron una investigación por corrupción. En 1992 se fuga del país y pide asilo en Colombia. Se declara “perseguido político”. Regresa a Lima en 2001 luego de que prescribieron los cargos. Vivía en Francia.

4 exmandatarios de Perú están involucrados en las investigaciones de la compañía Odebrecht.

Impiden ingreso a Humala
Sus partidarios evitaron que ingresara al velatorio el exgobernante Ollanta Humala, opositor político. (I)