Caracas.-

Al menos cuatro muertos y dos heridos dejaron hoy dos enfrentamientos entre supuestas bandas criminales o paramilitares en el estado venezolano de Táchira (suroeste), en la frontera con Colombia, informaron fuentes de la Policía regional.

Una fuente de la Policía del Táchira informó a Efe de que se registraron dos choques armados en la localidad de Coloncito, capital del municipio Panamericano, que, según el informe, permanece militarizada para evitar nuevos hechos de violencia.

"Las autoridades de la región presumen que se trata de pugnas entre bandas irregulares, entre bandas paramilitares que se disputan el poder de la zona", detalló el portavoz, quien indicó que en esa región limítrofe operan bandas criminales, de origen colombiano, conocidas como "Los urabeños" y "Los paisas".

El primer choque armado se registró en la zona comercial de Coloncito, donde dos sujetos que se movilizaban en una moto dispararon contra otras dos personas que caminaban por el lugar y que fallecieron tras un intercambio de tiros.

Según el portavoz, las víctimas, de nacionalidad venezolana, fueron identificadas como Johnny González, de 38 años, y Víctor Mogollón, de 22, y que murió después de ser trasladado a un centro asistencial. Este último portaba una pistola 9 milímetros.

Dos mujeres, una transeúnte y una empleada de una tienda cercana al lugar, resultaron heridas en el incidente.

Otro enfrentamiento tuvo lugar a pocas cuadras de esa zona, esta vez entre motorizados y personas que viajaban en un vehículo. En el hecho perdieron la vida los venezolanos Adriana Villegas (23) y Raúl Hernández (28), quienes eran pareja y viajaban en la motocicleta.

La fuente indicó que se investiga si la documentación que portaban los fallecidos es auténtica y la posible vinculación de los muertos con bandas criminales.

Detalló que cuando ocurre este tipo de enfrentamientos, la primera hipótesis que "siempre surge es la pugna por el poder, guerra de bandas".

"Allí operan dos grupos: los urabeños y operan los paisas (... que) tienen una pugna muy fuerte por la zona, por el control del narcotráfico, por el control del contrabando", sentenció la fuente, y no descartó que se trate de bandas criminales nacidas en Colombia, pero con integrantes en el país.

Las "bacrim", como el Gobierno colombiano denomina a las bandas criminales herederas de los paramilitares y que lograron reagruparse tras su dispersión en 2008, se consideran ligadas al narcotráfico y responsables de varias masacres.