El titular de la Secretaría Nacional de Planificación (Senplades) hace un balance de los 7 años, que se cumplen el próximo miércoles, desde que el Gobierno de Rafael Correa llegó al poder. Resalta grandes avances en temas sociales, económicos y de planificación, pero cree que la responsabilidad sobre la transformación del Ecuador no es solo del Gobierno, sino también del sector privado y la ciudadanía. Menciona como un tema clave el consumo, al que Senplades apuntará este año con una estrategia de comunicación para promover un gasto más consciente.

¿Cómo evalúa el Gobierno estos 7 años tras la implementación de 3 planes nacionales del Buen Vivir (2007-2010, 2009-2013 y 2013-2017)?

Sobre el último plan no tenemos todavía un año de ejecución, no podríamos hacer una evaluación, la haremos en marzo de este año, pero sí podemos tener una evaluación de las líneas fuertes del Gobierno en estos 7 años. Para el 15 de enero tendremos un documento que actualizará los datos (sobre los logros del Gobierno). ¿Qué líneas se resaltan? Una, el tema del crecimiento económico, tenemos expectativa de cerrar 2013 con un crecimiento de entre 3,8% y 4%, que vuelve a ubicar al Ecuador por encima del promedio de la región. Otro, volvimos a tener la inversión más importante en la región, cerramos el 2013 con el 15% respecto del producto interno bruto (PIB) y tuvimos una ejecución global mayor al 85%. Un tercer tema es el de pobreza, habría que esperar los datos de diciembre, sin embargo esperamos cerrarlo entre 24 y 25% de pobreza por ingresos, y mantendremos la extrema pobreza en un dígito (alrededor del 8,5%). Eso implica que a los 7 años de Gobierno alcanzaremos una caída de 12 puntos porcentuales en pobreza nacional por ingresos. Un cuarto eje es el tema de servicios a la ciudadanía y ahí es impresionante la obra que hemos hecho en términos de salud, educación, inclusión social, con una característica cada vez más asentada: la desconcentración. Los servicios cada vez están más adecuados a las realidades locales porque ya empieza a notarse la figura de distritos y circuitos, la planificación territorial. Y un tema más que rescataría son los indicadores de seguridad, donde tenemos una caída en 6 de los 7 indicadores de mayor incidencia en seguridad.

Hemos disminuido pobreza, hemos sido exitosos en reducir la desigualdad y hemos sido exitosos en movilidad social ascendente. Estas 3 cosas no necesariamente ocurren en un país al mismo tiempo, pero nosotros hemos sido muy exitosos en ese sentido’, explicó Pabel Muñoz, quien está al frente de la Senplades desde agosto.La inversión pública es el motor de crecimiento, ¿seguirá aumentando?

Para este año la Asamblea aprobó poco más de $ 7 200 millones. Las prioridades para 2014 son el sector de Producción, al que se destinará el 25,8% de los recursos; Sectores Estratégicos, el 23,5%; Desarrollo Social 17,5%, y Talento Humano 15,9%. La dinamización de la economía tiene que producirse por la inversión pública y privada. No creemos que el único motor de crecimiento es la inversión pública, nos interesa que haya inversión privada. De hecho, el énfasis en el cambio de matriz productiva supone una alta inversión del sector privado. Así lo queremos y así está pensado el esquema. Lo que estamos planteando como estrategia es que nosotros trazamos la cancha, ponemos las reglas del juego y generamos los incentivos adecuados para que el sector privado pueda hacer sus inversiones. Sin embargo, vamos a seguir haciendo la inversión pública que el país requiera. Tenemos prevista una inversión para 2014 del 15% del PIB, eso seguramente nos va a poner otra vez como el país de mayor inversión pública en la región. Estamos generando las condiciones estructurales para que la inversión privada pueda dinamizarse.

¿Qué proyectos son prioritarios para este año?

En Producción están: el Ministerio de Obras Públicas con infraestructura, el Ministerio de Turismo, con promoción turística, y el Ministerio de Agricultura con innovación tecnológica, semillas, cárnicos, legalización y acceso a tierras. En Sectores Estratégicos sigue la construcción de las centrales hidroeléctricas, de proyectos termoeléctricos y de transmisión, así como proyectos multipropósito de agua y control de inundaciones. En lo que respecta a Desarrollo Social que engloba a los ministerios de Salud, Vivienda e Inclusión Social está la construcción de hospitales y centros de salud, vivienda rural, urbano marginal y social, desarrollo urbano, equipamiento e infraestructura. En lo que tiene que ver con Talento Humano, las inversiones irán principalmente a infraestructura para educación, formación de docentes, universidades emblemáticas, becas y proyectos de investigación, ciencia y tecnología.

Usted menciona el tema del agua, este año el Gobierno lanzará una campaña para erradicar la pobreza extrema que contempla contar con agua potable y alcantarillado, ¿este tema formará parte de las elecciones?

El Plan 2013-2017 tiene 12 objetivos, 93 metas, más de 1 000 lineamientos estratégicos y más de 100 políticas. Ese es el paraguas, pero hay 2 cosas que como Gobierno impulsamos decididamente: una es la transformación de la matriz productiva, que la lidera el vicepresidente Jorge Glas, y otra es la estrategia de erradicación de la extrema pobreza que la coordina Senplades. Lo más difícil es bajar la extrema pobreza por necesidades básicas insatisfechas y un componente fundamental ahí es el tema del agua potable y de alcantarillado. Eso se vuelve más difícil porque esos temas son competencia de los gobiernos autónomos descentralizados (GAD). Necesitamos tener un aliado estratégico en las alcaldías para llegar a nuestra meta en 2017, que es la cobertura del 95% a nivel nacional de agua potable y alcantarillado. Si llegamos a ello estaríamos erradicando la extrema pobreza por necesidades básicas insatisfechas. Por eso nos parece una oportunidad que el país tenga en febrero las elecciones para las autoridades locales porque estamos convencidos que en el caso de las municipalidades un candidato que no hable de agua potable y alcantarillado, si gana, seguro será un pésimo alcalde. En algunos cantones hay una actitud irresponsable de autoridades locales que están más dispuestas a pavimentar la calle sin que todavía tengan estructura de agua potable y alcantarillado, privilegian una obra que da votos, pero que no está resolviendo necesidades fundamentales.

En el tema de condiciones de vida, existe una reducción de la pobreza, pero también hay más movilidad social y una ampliación de clase media, ¿cómo seguir avanzando en eso?

Mientras menos pobreza y más igualdad tenemos, el reto se vuelve más difícil. Cuando tienes un nivel de población en condiciones desfavorables como en 2000, por la crisis, bajar esa pobreza en 15 o 20 puntos no es tan difícil, porque lo único que se puede hacer cuando se está tan mal es mejorar. En cambio, cuando tienes la pobreza de 27%, al iniciar 2013, y a junio bajamos a 23,7% estamos hablando de 3,3 puntos. Esos puntos son cada vez más costosos de bajar porque ya se está atacando una pobreza más estructural. Hemos disminuido pobreza, hemos sido exitosos en reducir la desigualdad y hemos sido exitosos en movilidad social ascendente. Estas 3 cosas no necesariamente ocurren en un país al mismo tiempo, pero nosotros hemos sido muy exitosos en ello.

¿Cómo entender las palabras del Presidente, quien dijo que será un año difícil, pero que todo está planificado?

Es un año difícil por la paralización de la refinería (de Esmeraldas) que va a suponer mayor importación de derivados de crudo. Eso va a afectar aun más nuestra balanza comercial que ya está golpeada porque el problema estructural de la economía es fundamentalmente el sector externo, y eso está dado por el modelo económico que nos impusieron: un modelo de cambio fijo extremo que es la dolarización. Sin moneda nacional somos muy vulnerables a los desequilibrios de la balanza comercial. En estas condiciones debemos utilizar al máximo nuestra capacidad de regulación, por ejemplo, el establecimiento de un conjunto de normas técnicas.

¿Contemplan este año diseñar alguna política para implementar a mediano plazo el desmonte de subsidios?

Siempre monitoreamos el peso e impacto de los subsidios en la economía ecuatoriana, si algún momento fuera necesario, tomaríamos alguna decisión al respecto. Hoy más bien nos interesa apostar por una nueva forma de producir y una nueva forma de consumir. Lastimosamente el país siempre ha creído que las soluciones se dan únicamente por el incremento de oferta: más escuelas, más hospitales, más servicios básicos. Pero no somos una sociedad consciente de nuestro consumo y nuestra demanda. Cuando hacemos un cambio tan profundo como el realizado en estos últimos años, es un error creer que la responsabilidad única y exclusiva es del Gobierno. Todo cambio en la sociedad implica una corresponsabilidad del sector privado y la ciudadanía, por ello necesitamos un sector privado que produzca más y mejor, y una ciudadanía que consuma de manera más consciente: consumir lo nuestro, ahorrar energía, electricidad, combustibles, agua.

Bajo esta perspectiva y dentro del cambio de la matriz productiva, se han priorizado nueve temas de trabajo, de los cuales Senplades colaborará centralmente en dos:agenda regulatoria y modulación de demanda. Esto va a traducirse en una aplicación mayor de nuestra facultad de regulación, y en campañas de concienciación y comunicación.