La afiliación a la seguridad social se volvió más atractiva
Varias reformas administrativas llevadas a cabo por el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) han hecho más atractivo el estar afiliado a la seguridad social: el aumento de las coberturas del seguro de salud (a los hijos menores de 18 años y a los cónyuges de los afiliados); la reducción del período de carencia para causar el derecho a las prestaciones del seguro de salud de 6 a 3 meses; los cambios en los modelos de gestión (prestaciones de salud a través de la contratación de servicios a clínicas, hospitales y centros médicos privados); la creación del Banco del IESS (Biess) en mayo de 2009 y la reactivación de los créditos prendarios, quirografarios e hipotecarios para los afiliados y pensionistas; y el mejoramiento de servicios, infraestructura y equipamiento.
Paralelamente, el IESS ha facilitado los procesos de afiliación de trabajadores en general y de empleadas domésticas, así como el pago de obligaciones, a través de trámites en línea. De acuerdo los registros administrativos del IESS, la ampliación en 2010 de la cobertura legal del seguro de salud a hijos menores de 18 años y cónyuges implicó que se duplique el total de la población potencialmente asegurada, de 3 146 198 en 2009 a 6 380 927 en 2010, alcanzando 8 151 385 en julio de 2013. Así, la cobertura legal pasó de 20% de la población total en 2007 a 52% en 2013.
Sobre esto, el estudio del Banco Mundial, Las caras de la informalidad, sostiene que otras razones del incremento del porcentaje de trabajadores afiliados a la seguridad social “probablemente sean los recientes cambios que permiten la afiliación de trabajadores a tiempo parcial, cierta relajación de las normas que exigen un período mínimo de empleo continuo antes de poder tener acceso a las prestaciones y la posibilidad de recurrir a servicios médicos tanto en centros públicos como privados”. Plantea, además, que estas reformas y el control más estricto a los empleadores luego de la consulta popular que dispone la penalización de la no afiliación “pueden haber incrementado los índices de afiliación y la percepción del valor de la seguridad social”.
Por otra parte, el estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Andemic Informality. Assesing Labor Informality, Employment, and Income Risk in the Andes, considera la concesión de préstamos hipotecarios en términos competitivos a los afiliados a la seguridad social como un incentivo novedoso para expandir voluntariamente la cobertura de los sistemas previsionales. En efecto, el volumen de crédito total que entregó el Biess en el año 2012 ascendió a $ 1 875,7 millones y equivale al 2,1% del producto interno bruto (PIB).
Actualmente, el BIESS es el principal actor en el mercado hipotecario y ha desplazado a la banca privada. Representa el 68% del volumen de crédito total en este segmento. Entrega créditos hipotecarios a largo plazo y con menores tasas de interés que los bancos privados. En resumen, desde la perspectiva de la demanda, se puede indicar que hay un mayor incentivo para que los trabajadores reclamen su afiliación a la seguridad social. Es necesario evaluar actuarialmente si las reformas al seguro de salud tienen el financiamiento suficiente de mediano y largo plazos.