La última vez que vio a su esposo con vida fue el sábado anterior, cuando la invitó a comer fritada en el cantón Salitre. Ayer, entre lágrimas, Gertrudis Aldaz elevaba sus manos al cielo buscando una explicación al crimen de su cónyuge.

La mujer relató que su conviviente, Geovanny Cóndor, de 47 años de edad y oriundo de la ciudad de Quito, trabajó durante 27 años como secretario general del sindicato del Municipio de Samborondón y no tenía enemigos, por lo que aseguró que su muerte solo podría tratarse de una confusión.

El suboficial de Policía Carlos Charlengo, quien realizó el levantamiento del cadáver, señaló que, cuando encontraron el cuerpo, el occiso no tenía sus pertenencias, por lo que presume que se habría resistido a un posible robo y por esa razón lo asesinaron.

El cadáver de Cóndor fue hallado en la entrada del cantón Salitre, en un lugar conocido como “El Cerro”, específicamente en un botadero de basura. “No es la primera vez que aparece un muerto en ese sector, hace un mes también abandonaron ahí a un joven de unos 20 años”, dijo David Mora, tío del fallecido.

Mora comentó que su sobrino vivía en el recinto Boca de Caña, en la vía a Guayaquil, pero que ese día había ido hasta Salitre para comer con su esposa y luego tenía previsto dirigirse a su trabajo.

El allegado de Cóndor añadió que, al parecer, a su sobrino no lo mataron en el lugar en donde fue abandonado, porque su cuerpo recién apareció la mañana de ayer. “Salitre es pequeño, fácilmente en la tarde lo podían encontrar, pero aquí hay algo oculto”, manifestó.

El cuerpo sin vida de Geovanny Cóndor fue trasladado, a las 06:45 de ayer, hasta la morgue de Salitre. A ese lugar llegaron sus cuatro hijos y su esposa, aún incrédulos de lo que había sucedido.

La nuera del fallecido, quien no se identificó por temor a represalias, dijo que su familia está convencida de que su suegro no fue asesinado a causa de un robo y que seguramente se llevaron sus pertenencias para esconder el verdadero móvil del crimen.

Fue con un disparo en la cara que los asesinos acabaron con su vida, así lo reveló el ayudante forense Carlos Cajas Romero.

Sandra Rodríguez, concejal de Samborondón, quien sufrió un atentado hace aproximadamente 15 días, mientras cerraba su negocio, dejó entrever que la muerte del empleado público del Municipio no fue precisamente por robarle sus pertenencias.

La funcionaria indicó que el atentado cometido contra ella y el reciente crimen podrían estar relacionados quizá porque ella y Cóndor son afiliados al partido Alianza PAIS.

El Comando Sectorial de Policía de Durán-Samborondón inició las indagaciones de rigor para dar con el paradero del o los responsables y determinar la razón del crimen.