María Isabel Checa invirtió $17.717 en la adquisición de una vivienda de dos pisos que no recibió. Ella es parte de los 470 perjudicados de las empresas inmobiliarias Habitavia Home S.A., Desusnova y Víavivendi de Quito que esperan este año recuperar el valor de su inversión.

Los responsables, Henry B. y Sara F., exdueños de las constructoras, fueron declarados culpables por el delito de estafa por el Tribunal Quinto de Garantías Penales de Pichincha, en la audiencia de juzgamiento de la última semana de diciembre de 2014.

En el proceso participaron 112 acusadores particulares, además del fiscal.

El fiscal Nelson Guano argumentó que los procesados incumplieron con las ofertas de compra-venta de los proyectos habitacionales, que estaban ubicados en la vía Los Chillos, en el suroriente de Quito. “Los perjudicados habrían realizado depósitos de entre $ 5.000 y $ 45.000, que correspondían al 30% del valor del inmueble, incluso varios clientes pagaron la totalidad del monto”, señaló. Yañadió que el perjuicio económico ascendería a $ 3’115.000.  

Se determinó que existió sobreventa, pues se ofertaron 185 inmuebles a 1.190 personas.  

Mauricio Flores, abogado que representó a los afectados, afirmó que se demostró con claridad la responsabilidad del delito de los procesados con agravantes.  Por ello,  esperarán la sentencia y luego la venta de los bienes  con la finalidad de devolver los dineros a las familias.

Paulina Vinueza participó como procuradora en el proceso, y también es una de las afectadas. Ella perdió $ 16.420 en la compra de vivienda que no recibió. “Analizaremos la sentencia para luego continuar con los procesos para recuperar los valores invertidos”, dijo.

Los procesados, que están recluidos en el Centro de Rehabilitación Social de Cotopaxi, también tienen otra condena por estafa a otros afectados por Habitavia Home S.A., según consta en la página de la Función Judicial.

Los procesados participaron en la audiencia a través de videoconferencia, por su seguridad. Según los exclientes, Habitavia Home tuvo problemas a inicios de 2013, cuando no cumplió con la entrega de casas.

Desde ese año se desconocía la ubicación de Henry B. y Sara F., quienes fueron detenidos en Lago Agrio, el 30 de agosto de 2013.