Primera sentencia de culpabilidad por una de las muertes del 30-S
El dictamen emitido por el presidente del Tribunal Primero de la Corte Nacional de Justicia, Guillermo Durán Arévalo, sobre la culpabilidad del exteniente Francisco G., por la muerte de Juan Pablo Bolaños, deja un registro histórico, al convertirse en el primer caso (con muerte) relacionado con la revuelta policial del 30 de septiembre de 2010, en recibir sentencia.
Tras el dictamen, la defensa del exoficial de la Policía señaló que en este caso se han cometido “barbaridades, ya que hubo incongruencia jurídica, pues se inició la indagación fiscal por homicidio inintencional y ahora en la sentencia se cambió a homicio simple”, comentó José Vicente Logacho, uno de los abogados de Francisco G.
En parte del dictamen, el tribunal señaló que encontró culpable de homicidio simple al exoficial, basado en el artículo 449 del Código Penal.
La Fiscalía no pudo justificar los agravantes en este caso, por lo que se modificará la penaSin embargo, consideró que la Fiscalía no pudo justificar todos “los agravantes” presentados, por lo que se modificará la pena, ya que existen “circunstancias atenuantes”, las cuales serán comunicadas por escrito y debidamente motivadas a los casilleros judiciales.
La fiscal Paola Gallardo basó su acusación en el informe pericial realizado al arma de dotación que estaba a nombre del policía implicado, según el cual las 2 balas que mataron a Juan Pablo Bolaños salieron de esa arma de fuego.
Al presentar los hechos, la Fiscal aseguró que los disparos fueron realizados presumiblemente por el oficial la noche de la revuelta policial, pues él habría apuntado a las siluetas que estaban sobre la avenida Mariana de Jesús y disparó una ráfaga de tres tiros.
Esa acción provocó las heridas mortales que a la postre terminaron con la vida de Juan Pablo Bolaños. Además, expuso la fiscal, ninguno de los testigos convocados a la audiencia de juzgamiento ha podido determinar la presencia del acusado al interior del hospital, como la defensa había manifestado.
Pero, precisamente, esa afirmación motivó la réplica del abogado defensor José Moreno, quien señaló que el fusil del uniformado no tiene el mecanismo que le permita disparar una ráfaga y que eso invalida el argumento de la Fiscalía por ser impreciso. Igualmente, replicó que tampoco ninguno de los testigos pudo reconocer al expolicía como el autor de los disparos que mataron a Bolaños, además de insistir en que cambiaron el arma del policía para sindicarlo.
Al final de las réplicas, el pasado martes los tres jueces se retiraron a deliberar y reinstalaron la audiencia el miércoles, pasadas las 20:00, y emitieron su dictamen. Se espera que hasta el lunes esté redactada la sentencia, así como la pena que le impondrán a Francisco G.
Esta sentencia es la primera que se emite por uno de los 5 fallecidos que dejó la revuelta policial del 30 de septiembre del 2010.
Todavía se encuentran en etapa de indagación previa los casos de las muertes de los policías David Morocho, Froilán Jiménez y Edwin Calderón Landeta, y del soldado Edwin Panchi, además de Edison Pacheco. Todos perecieron por proyectiles disparados durante los acontecimientos del 30-S, en que también resultó herido de bala en la pierna el niño Israel P.