El Consejo de la Judicatura (CJ) presentó este lunes el Sistema Único de Pensiones Alimenticias (SUPA), que tiene por objetivo garantizar que la recaudación y el cobro de las pensiones alimenticias se realicen de forma "adecuada, ágil y oportuna".

Este proyecto se implementa inicialmente en Azuay, Imbabura, El Oro, Galápagos, Napo, Orellana y Zamora Chinchipe. El resto de provincias se incorporará progresivamente hasta el 19 de octubre.

Antes, estas operaciones se ejecutaban mayoritariamente a través de cuentas virtuales de una sola entidad bancaria. Ahora el procedimiento cambia y tanto los beneficiarios (aproximadamente 600 mil en todo el país), como los alimentantes (personas obligadas a pagar pensiones), dispondrán de un mayor número de dependencias financieras para realizar este proceso.

En ese contexto, los alimentantes deberán realizar sus depósitos en el Banco del Pacífico y sus redes asociadas; en todas las sucursales del Banco Nacional de Fomento; y en las redes de cooperativas en todo el país.

En tanto, el cobro se hará a través de cuentas reales de cualquier banco del sistema financiero nacional que la madre o el beneficiario hayan identificado en la providencia judicial pertinente.

El presidente del CJ, Gustavo Jalkh, señaló que el SUPA tiene varios beneficios, entre ellos, el incremento anual automático de las pensiones de acuerdo al porcentaje de inflación y sin solicitud judicial.

De igual forma, alimentantes y beneficiarios podrán consultar en tiempo real, en el portal web del Consejo de la Judicatura (www.funcionjudicial.gob.ec), el estado de las obligaciones económicas y el historial de pagos realizados.

El titular de la Judicatura explicó que el SUPA genera un beneficio adicional a la Función Judicial porque "descarga a los jueces y secretarios de una gran cantidad de trámites, dejándoles más tiempo disponible para la atención de casos nuevos".

De su parte, Alexandra Muñoz, directora Financiera del CJ, explicó que el sistema no permite pagos parciales y por ello, cada mes, los beneficiarios tendrán en sus cuentas el valor completo de su pensión, garantizando así la rentabilidad que ofrece la banca. En el caso de mora en los depósitos, el SUPA asegurará el cálculo de los respectivos intereses, de acuerdo a la tasa activa vigente.

Si la cuenta de ahorros en la que reciben las pensiones corresponde al Banco del Pacífico, obtendrán, sin costo, la tarjeta PACIFICARD DEBIT, con servicios como: seguro de muerte accidental y/o desmembramiento; retiros; consulta de saldos de la cuenta; transacciones en cajeros automáticos; pagos en efectivo; pago de servicios básicos, impuestos prediales, matriculación vehicular, etc.

En cuanto a los alimentantes, ellos realizarán sus depósitos empleando el código de tarjeta que les asigne el SUPA. Con eso, tendrán acceso a información actualizada.

El SUPA permitirá que las empresas e instituciones conozcan los valores que deben ser descontados a sus empleados, a través de roles de pago, por concepto de pensiones alimenticias.  A partir de esta información, podrán cancelar las respectivas retenciones judiciales mediante cheques certificados o transferencias al Banco del Pacífico.

Según el cronograma, el SUPA entrará en vigencia el lunes 12 de octubre en las provincias de Guayas y Pichincha; el 13 de octubre en Santo Domingo y Carchi, el 14 de octubre en Tungurahua y Cotopaxi; el 15 de octubre Manabí y Santa Elena; el 16 de octubre en Los Ríos y Cañar; mientras el 19 de octubre en Loja, Chimborazo, Bolívar, Esmeraldas, Pastaza, Sucumbíos y Morona Santiago. (I)