En los 35 centros de rehabilitación social que funcionan en 19 provincias del país permanecen actualmente 17.823 ciudadanos ecuatorianos y extranjeros  privados de la libertad, según el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. A este grupo se suman quienes están en los Centros de Detención Provisional (CDP) y Casas de Confianza (internos en fase de prelibertad). Con ellos, el total de reclusos llega a los 19.440, de estos el 91,72% es de sexo masculino, de los cuales el 9,7% corresponde a  extranjeros, quienes en su mayoría pagan penas  por tráfico de drogas.

Según César Duque, asesor jurídico de la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos (Cedhu), la población carcelaria sobrepasa la capacidad de los reclusorios del país que solo pueden albergar a 10.000 individuos, lo que evidencia  un exceso de 7.823 internos (44%).

Los centros de rehabilitación social de Guayaquil, Quito y Santo Domingo de los Tsáchilas registran el mayor número de reclusos. Hasta el 15 de agosto de 2012 el Ministerio reportó 5.724 personas privadas de la libertad (ppl) en la Penitenciaría del Litoral, cuando su capacidad máxima es de 2.533. Solo esta cárcel tiene más del 30% de la población carcelaria del país.

Mientras que en el ex penal García Moreno (Quito) la cifra es de 1.069 presos, lo que duplica su capacidad. Para reducir los niveles de hacinamiento producto de la sobrepoblación carcelaria, los integrantes de las bandas de la “Mama Lucha” y “María Luisa”, recientemente sentenciados a 3 y 5 años de prisión, por ejemplo, fueron llevados al Centro de Rehabilitación Social Bellavista, de Santo Domingo de los Tsáchilas, el cual también  ha sobrepasado al doble su capacidad, admitió la directora del centro, Silvia Aguirre.

Actualmente hay 817 internos, por lo que con  la llegada del grupo mencionado y los de otros reclusorios del país, hasta cinco personas comparten una celda que es para dos. El pabellón de mediana seguridad también vive una sobrepoblación de internos, puesto que fue construido para albergar a 150 y actualmente están 260. Similar situación ocurre en el pabellón de máxima seguridad -capacidad para 250 ppl-, en donde se ubica a dos presos por celda, cuando el espacio es para uno solo.

El Centro de Rehabilitación Social de Loja presenta un problema similar, a pesar de tener capacidad para asilar un tope de 150 internos, actualmente hay 776.

Ricardo Morales, de la Subsecretaría de Gestión de Atención a Personas Adultas y Adolescentes en Conflicto con la Ley, señaló que las condiciones de los privados de la libertad están mejorando de acuerdo al nuevo proceso de reestructuración en el que trabaja el Ministerio de Justicia.

Dijo que en Guayaquil se  construyeron y habilitaron  tres pabellones que cumplen con todos los estándares internacionales penitenciarios, con capacidad para 200 ppl. La ministra Johana Pesántez, en su última visita a la ciudad, manifestó que la infraestructura es parte de un complejo penitenciario compuesto por 12 pabellones en total, en los cuales el Ministerio confinará a las ppl que estén siendo aún procesadas por diversos delitos.

El complejo penitenciario está estructurado por cuatro áreas que son: pabellón mujeres, pabellón de mínima seguridad, pabellón de mediana seguridad y pabellón de máxima seguridad. Tiene un avance físico de un 47%.

Mientras que el Centro de Rehabilitación Social Regional-Guayas, que se construye en un terreno situado al lado del pabellón de máxima seguridad, conocido como “La Roca”, recluirá a 3.717 ppl, todas ya sentenciadas, provenientes de la Penitenciaría del Litoral y de las cárceles de Babahoyo, Vinces, Machala y Santa Elena.

Wellington Alvarado, abogado en el libre ejercicio, señaló que el hacinamiento no es el único problema del sistema penitenciario, puesto que la mayor parte de las personas que están recluidas no tiene sentencia condenatoria y sus causas están en procesos judiciales.

Sin embargo, un informe de la Unidad de Coordinación General de Planificación del Ministerio de Justicia y DD.HH. revela  que, según el estado de causa, hay una población de sentenciados  a nivel nacional de 10.031, mientras que el resto está en condición de procesado.

Asimismo, la cartera de Estado informó que desde el 21 de mayo se trabaja en la construcción del CDP Sucumbíos, para separar a la población de contraventores, sentenciados y procesados. A partir del 2 de julio se incrementaron plazas en los centros de rehabilitación social de Quevedo (60 ppl) y Babahoyo (20).

Mientras que la construcción de lo que será el Centro de Rehabilitación Social Regional Sierra Centro Sur, en Cuenca,  ya inició con los trabajos de movimiento de tierras.

La inversión que se realizará para la construcción de la obra será de 20 millones de dólares. La incorporación de ese centro regional se ha planteado para dar acogida a las personas que han sido sentenciadas. 

Las personas que aún se encuentran con prisión preventiva serán ubicadas en los CDP, indicó el pasado 6 de agosto el alcalde de Cuenca, Paúl Granda. Agregó que con esa clasificación se respetará el mandato constitucional con respecto a la separación de las personas declaradas culpables y aquellas que aún están esperando sentencia y se presume su inocencia.