El 2 de noviembre de 2017, a las 17:20, una patrulla del Grupo Especial Móvil Antinarcóticos (GEMA) fue atacada con granadas y disparos en el control de San Lorenzo, en Esmeraldas. Fue una emboscada que por poco les cuesta la vida a cuatro uniformados especializados en la lucha contra el tráfico de drogas. Ninguno resultó herido, pero en su vehículo quedaron las huellas del ataque.

Un informe de Inteligencia al que accedió este Diario revela que el principal sospechoso de ese ataque fue ‘Guacho’,  el mismo que, cinco meses después, está atado a once atentados con explosivos y enfrentamientos que han dejado cuatro muertos, más de 30 heridos y el secuestro de Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra, equipo periodístico de diario El Comercio.

Los uniformados describían a ‘Guacho’ como un “ciudadano afrodescendiente, de media estatura, contextura delegada, cabello corto, cejas delgadas, nariz gruesa, boca  gruesa y una cicatriz en la nariz”.

Además informaban que su accionar delictivo comprendería la frontera ecuatoriana con Colombia y que “lideraría un grupo de personas que cometerían varias actividades ilícitas dentro del territorio ecuatoriano, cuya finalidad serían delitos vinculados al narcotráfico, como asesinatos, secuestros y posibles atentados”.

Ahora se conoce que Wálter Patricio Arizala o William Quiñónez, más conocido como ‘Guacho’, nació hace 27 años en Limones, una zona rural de San Lorenzo. Desde 2007 y por más de 10 años estuvo en el Frente 29 y en la Brigada Daniel Aldana de las desmovilizadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Allí era el organizador de comunidades, jefe financiero y experto en explosivos. Tras el acuerdo de paz, ‘Guacho’ se convirtió en uno de los capos de la droga.

Este puesto lo consiguió luego de la detención de Pedro Álava, alias ‘Gerald’, uno de los narcotraficantes más buscados de los últimos años, ahora detenido en Estados Unidos.

‘Guacho’ operaba bajo las órdenes de Álava, quien también es ecuatoriano. En esa organización usaba los ríos fronterizos de Esmeraldas para transportar la droga refinada en laboratorios de Tumaco. Sus operaciones se concentraban en las zonas aledañas a Mataje, Limones y San Lorenzo y en los corregimientos colombianos de Llorente y veredas de El Azúcar, Vallenato, Los Cocos, El Playón, la Corazala, La Aduana, Yarumal, entre otras.

Desde estas zonas, el cartel de Álava logró enviar hasta 240 toneladas de cocaína hacia el norte del continente.

Intervención de la DEA
Es por eso que la DEA de Estados Unidos siguió su pista y lo arrestó en abril del año pasado. Junto con Álava cayeron sus lugartenientes Róbinson Castro Quiñónez, llamado ‘Rocho’, quien dirigía los laboratorios clandestinos, y Diego Arizala Segura, el ‘Zorro’, encargado de las comunicaciones del cartel.

La detención de ‘Gerald’ cambió las fichas de los grupos narcos.

Ahora aparece ‘Guacho’ como cabeza del Frente Óliver Simistierra en Colombia y como el cabecilla de Los del Guacho en Ecuador, la banda que asuela el norte de Esmeraldas. (I)