Un accidente de tránsito estremeció a la ciudad de Dallas, Texas, dejando como saldo dos víctimas fatales y un vehículo deportivo McLaren partido en dos tras un impacto devastador. El trágico suceso ocurrió alrededor de las 15:00 del pasado 9 de diciembre de 2024, en el barrio Lake Highlands.

Impacto mortal contra un árbol

Según reportes de la cadena informativa WFAA, el automóvil colisionó violentamente contra un árbol, destruyéndose por completo. Al llegar al lugar, los servicios de emergencia encontraron el vehículo dividido en dos partes. Las autoridades confirmaron que las víctimas, Cristóbal Flores Espino, de 29 años, y Robert Leroy Rocha, de 31, fallecieron instantáneamente.

Una tercera persona, ocupante de un auto afectado por el accidente, fue trasladada a un hospital local, aunque no se han revelado detalles sobre la gravedad de sus lesiones.

Rescate complicado

El departamento de Bomberos de Dallas señaló que los cuerpos de las víctimas no pudieron ser localizados inicialmente, requiriendo la intervención de un equipo especializado de rescate. Imágenes captadas desde el aire mostraron la escena del siniestro, descrita por la policía como "escalofriante".

La noticia ha generado una ola de comentarios en redes sociales, con usuarios debatiendo sobre la responsabilidad al volante y los riesgos de conducir vehículos deportivos de alta velocidad. "Estos coches no son un juego, deberían exigir cursos de manejo seguro", escribió un usuario. Otros han expresado su tristeza por las vidas perdidas tan jóvenes.

Flores y velas han sido colocadas en el lugar del accidente, mientras la comunidad de Lake Highlands muestra su pesar por la tragedia.

Exceso de velocidad: un problema mortal

La investigación del incidente continúa, pero las autoridades sospechan que el exceso de velocidad pudo haber sido un factor determinante en el siniestro. Este problema es una de las principales causas de muertes en carreteras de Estados Unidos.

De acuerdo con la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico (NHTSA, por sus siglas en inglés), más de 12.000 personas murieron en 2022 debido a la velocidad. En las últimas dos décadas, un tercio de las fatalidades viales han estado vinculadas a esta causa.

“El exceso de velocidad pone en peligro no solo al conductor, sino a todos los que están a su alrededor. Es un problema que requiere acción conjunta para ser resuelto”, enfatizó la NHTSA.

El trágico accidente de Dallas es un recordatorio de los riesgos asociados a la conducción irresponsable y el impacto devastador que puede tener en vidas humanas y comunidades enteras.

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— El Telégrafo Ecuador (@el_telegrafo) December 15, 2024