Blanca Guamangate Ante, quien fue electa viceprefecta de Cotopaxi en 2009 y desde el viernes pasado dirige la Prefectura -en reemplazo de César Umaginga Guamán-, dijo a la prensa que se desafilió de Pachakutik, el brazo político de la  Conaie, “porque se alejó de la filosofía de no robar, no ser ocioso y no mentir”.

Guamangate ahora afronta una denuncia penal interpuesta por Umaginga ante la Fiscalía: por usurpación de funciones como prefecta.

Carlos Poveda, abogado del prefecto destituido por disposición de la Contraloría, señaló que la denuncia se sustenta en que Umaginga continúa en el cargo mientras el Tribunal Contencioso Administrativo no ratifique su destitución por   presunto nepotismo y desviaciones administrativas.

Guamangate, nacida en Sigchos (Cotopaxi), asegura: “No me he alejado de las 33 organizaciones indígenas”. Desmiente que esté alineada con el partido de Gobierno (A. PAIS) y dice que trabajará  sin miramientos políticos, porque le eligieron “todos los cotopaxenses”.

La dirigente ha acompañado a Umaginga en el Gobierno Provincial  dirigiendo especialmente proyectos en el sector rural. Antes, entre 1989 y 1994, se desempeñó como profesora comunitaria de Educación Bilingüe en la Parroquia Chugchilán, del cantón Sigchos; y hasta 2008 formó parte del equipo de capacitación de la Federación de Organizaciones Indígenas y Campesinas de Chugchilán, base del Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi (MICC). Del 2002 al 2003 fue parte del equipo técnico ampliado de la Conaie, como técnica local del MICC.

Desde que asumió la Prefectura, con el respaldo mayoritario del Consejo Provincial, seguidores de Umaginga le gritan públicamente: “traidora”, “golpista”, “agua, ortiga, fuera Guamangate”, “prefecta de facto”, “chiquita traicionera”, “¡disfruta por un momento del sillón porque te vamos a sacar!”, etc., según lo han recogido los medios de comunicación.

Frente a eso, Guamangate señaló: “Ya no es época de barbarie, todo lo es por el diálogo, por la fuerza nada”. En una de sus primeras decisiones como primera autoridad de la provincia, Guamangate destituyó a los 14 jefes departamentales de la Prefectura y dejó abierta la posibilidad de  restituir el cargo a Umaginga sólo si las instancias judiciales le dan la razón a él y no a la Contraloría, entidad que detectó las supuestas irregularidades.

A eso se suma que la sambleísta por Pachakutik, Lourdes Tibán, anunció el inicio de un juicio penal en contra de Guamangate, también por presunta arrogación de funciones. Señaló que se calificó la impugnación y que esperan la decisión del Tribunal Contencioso Administrativo.

La legisladora no cesa sus críticas en contra de la líder indígena, quien es licenciada en Ciencias de la Educación con diplomado en Gerencia de Marketing. Además es especialista en Gestión Local;  tiene un diplomado en Gestión Política en Democracia y Participación Electoral y también es Magister en Gerencia Educativa y Desarrollo Social.

A ella, Tibán la acusa de “haberse prestado a un artilugio político” con Alianza País y el Gobierno para traicionar a Umaginga. “Pónganle en un concurso a Umaginga y Guamangate y allí veremos quién gana”, aseguró Tibán, quien le recordó a la ahora prefecta que quien la llevó a la política fue Pachakutik y quien le enseñó lo que hoy sabe es Umaginga.