Alrededor de 60.000 habitantes, de los barrios del sur de la ciudad de Esmeraldas y del cantón Atacames, se quedaron sin agua potable a causa de la rotura de la tubería de distribución, que transporta 120 litros de líquido por segundo, ocurrida en el sector la Y de Vuelta Larga.

El hecho se produjo la tarde del lunes y se prevé que la reparación concluya hoy, según Lenín Montaño, del Departamento de redes de agua y alcantarillado de la empresa San Mateo (Eapasa).

Los sectores afectados son Gatazo Dos, Buen Pastor, Casa Bonita, Judiciales, La Primavera, La Tormenta, San Miguel y el cantón Atacames, hasta la parroquia Tonchigüe. “Es el quinto daño registrado en lo que va del año por las lluvias y la corrosión de la tubería”, indicó el funcionario.

No obstante, más de 20 reparaciones se han realizado en ese tramo a un costo superior a 200.000 dólares. A lo que se suma el desperdicio de agua, incluso inundaciones que se producen.

Entre tanto, la escasez de agua potable genera reclamos de los propietarios de hoteles y negocios en Atacames, quienes se abastecen a través de tanqueros de 55 galones, que  cobran hasta 60 dólares por viaje.

El presidente ejecutivo de Eapasa, Miguel Salvatierra, para solucionar este problema gestiona la edificación de un tramo de 10 km desde el tanque de carga elevado.

Para instalar la nueva tubería de 1.200 milímetros con variantes de 900 y 600 milímetros se requerirían 2’000.000 de dólares. La variante se adquirirá a través del Instituto Nacional de Contratación Pública (Incop).