Forajidos tardaron un año para enrumbar sus planes
En las elecciones generales de 2006 participaron 13 presidenciables representando a diferentes agrupaciones. En esa justa competían caras conocidas de la política como Marco Proaño Maya, León Roldós, Cinthya Viteri, Álvaro Noboa, Gilmar Gutiérrez, entre otros, junto a novísimos aspirantes como Marcelo Larrea o Rafael Correa.
Esa situación de ser más o menos conocidos, influía en la intención del voto. A poco más de un mes y medio de los comicios, diarios de la época publicaban encuestas que ponían primero a León Roldós, seguido de Cynthia Viteri, en tercer puesto a Rafael Correa y en cuarto lugar a Álvaro Noboa.
Sin embargo, cuando se conocieron los resultados de la primera vuelta, realizada el 15 de octubre, fue Noboa quien encabezó el primer lugar, seguido de Rafael Correa. Roldós y Viteri terminaron en cuarto y quinto lugar, respectivamente. El legislativo fue captado por el PSP y el PRIAN. Alianza PAIS, el movimiento de Correa, no presentó candidatos
En el balotaje se impuso el binomio Correa-Moreno con el 56,67% de los votos.
La campaña de 2006 giró alrededor de la Asamblea Constituyente, una de las propuestas capitales de Correa para liberar al Congreso de la dictadura de la partidocracia.
El programa de gobierno de PAIS enunciaba una revolución en los aspectos sociales, constitucionales, éticos, productivos, de soberanía, en la unión latinoamericana.
Traducidos en la no firma del TLC, recuperación de la base de Manta en manos de militares estadounidenses, acercamiento con gobiernos latinoamericanos de izquierda (Chávez, Lula, Néstor Kirchner, Evo Morales). Ofrecimientos que fueron cumplidos ampliamente.
El proceso electoral del próximo 17 de febrero es la continuación de una práctica democrática que no se ha interrumpido desde los comicios de 2006 cuando Alianza PAIS logró la Presidencia del Ecuador.
La poderosa ilusión movilizadora fue la Constituyente
Y se la hizo. se cumplió a pesar de todos los obstáculos y resistencias de la partidocracia. un candidato que como político era desconocido despertó la esperanza de muchos sectores. su personalidad y tesis convocaron a grupos dispersos y a la vez engendró a su mayor contrincante político: la prensa privada y comercial