El Gobierno Nacional inauguró la primera Planta de Tratamiento de Agua Potable por hidroxigenación Iónica del país, que beneficiará a más de 25 mil habitantes del cantón Puerto López.

Se trata de un plan piloto, ejecutado por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército, que tiene como objetivo desechar procedimientos convencionales, como la utilización de cloro u otros sistemas químicos, para alcanzar la potabilización del líquido vital.

El sistema potabilizador de Puerto López genera 120 litros de agua por segundo. El líquido vital proviene de las reservas del Río Ayampe y luego ingresa a la flamante planta potabilizadora. En el lugar, hidrociclones con tuberías de alta tecnología dividen el lodo del agua cristalina.

El tratamiento continúa: el líquido continúa por las ectro-válvula y finalmente descansa en los modulos de potabilización, donde se inyecta ozono y oxígeno. Finalmente, el agua potable sale de la planta de tratamiento hacia los hogares de la comuna de Ayampe, la parroquia de Machalilla y todo el cantón Puerto López.

William Ponce, diseñador ecuatoriano del proyecto, informó que la obra en su conjunto -construcción, ampliación y mejoramiento de las líneas de conducción, estación de bombeo, redes de distribución y sistema de potabilización- tiene una inversión de aproximadamente 17 millones de dólares.

Durante la inauguración, el Presidente Rafael Correa exteriorizó su satisfacción por la construcción de la obra. Ratificó que, de comprobarse la sustentabilidad, ahorro económico y beneficio del proceso, el Gobierno Nacional buscará la estandarización de ese sistema de agua potable.

El Jefe de Estado recordó que la antigua Junta de Recursos Hídricos, entidad rectora del agua, anterior a la Revolución Ciudadana, no cumplió con el propósito de distribuir el líquido vital en los cantones de Puerto López, Jipijapa y Paján. "Prohibido olvidar. Es increíble que en el siglo XXI sigamos celebrando que tenemos agua, algo que debió solucionarse hace más de 100 años", acotó.

Walter Solís, Secretario Nacional del Agua, enfatizó que la planta de agua potable deja atrás aquella era del negociado de los tanqueros, que eran parte de mafias organizadas que monopolizaron el producto.