Las intenciones de la publicación de una serie de artículos por parte de los dueños del periódico quiteño El Comercio en contra del Diario público El Telégrafo son obvias, según el asesor general de la empresa Editores Nacionales Gráficos (Editogran), José Orús, para quien la  desesperación por la pérdida de publicidad y de lectores entre las instituciones públicas los obliga a desprestigiar con noticias falsas a su principal contendor.

¿Qué opinión le merecen los ataques de diario El Comercio en contra de El Telégrafo?

Cuando se vierte información falsa o distorsionada usted tiene dos escenarios: A, ignorancia; o B, mala fe, porque desde los tiempos del General Eloy Alfaro están acostumbrados a decidir sobre los asuntos del Estado,  desprestigiando a Presidentes e incluso incitando a la violencia para tumbarlos.

¿Pero por qué hacen esto, por ignorancia o simplemente por mala fe?

Dicen que estamos en condiciones de imprimir 80 mil ejemplares diarios. -ver página 2 de El Comercio del domingo 8 de julio de 2012-. Es tan torpe y de poca profundidad esa Unidad de Investigación que no dice que la máquina puede imprimir 75 mil ejemplares, pero por hora, no por día. El resto del día, 23 horas, la maquinaria está dedicada a imprimir libros, revistas, guías telefónicas y a mantenimiento. No está ociosa como pretende hacer creer El Comercio.

¿Por qué hacen noticia de la potencia de las máquinas? ¿Sabe usted si existe alguna diferencia entre las de El Comercio y las de Editogran?

Las máquinas de ellos tienen un tiraje similar a las de Editogran, pero la mayoría del día pasan paradas. Así lo estimo porque no sé qué más produzcan, aparte de El Comercio y Últimas Noticias, y su tiraje no es para ocupar ni media hora de la prensa. 

¿Por qué entonces se ensañan con El Telégrafo y PP El Verdadero?

“Cuando los perros ladran es señal de que usted cabalga”, viejo dicho español. Usted cree que en solo un año y medio de tener una máquina competitiva, de ser premiados internacionalmente, reconocimientos que ellos han tardado decenas de años en obtener, se dedican tres días a atacarnos, buscando desprestigiar, cuando ellos ya están desprestigiados. Lo dicen las cifras de las encuestas. Ellos deberían dedicarse a subir su circulación y sus ventas publicitarias, pues vienen cayendo desde el año 2003. No lo digo yo.

Las empresas encuestadoras contratadas por ellos así lo dicen y es aparentemente la administración de El Comercio la responsable de haber descendido, no nosotros. Ellos saben que nosotros subimos todos los días. En la torta de inversión publicitaria en general, la prensa escrita tenía un 45 por ciento hasta el año 2000 aproximadamente, mientras que hoy tiene alrededor del 21 por ciento. Cómo no van a llorar ante esa realidad. ¿Quiénes son los culpables? Ellos mismos. Creen que pueden subir las tarifas de acuerdo a como suben sus gastos no como sube su lectoría. Estos costos sobredimensionados los hacen crecer saliéndose del costo por mil realmente comercial y haciendo que la televisión sea más económica para los inversionistas publicitarios.    

¿Y en publicidad cuáles son las cifras, según las compañías que hacen encuestas sobre la pauta?

Según ellos, tenían alrededor de 30 millones de dólares en el año 2007 y hoy andan por los 21 millones de dólares al 2011 (pero además con un dólar de un poder adquisitivo inferior), y así seguirán cayendo porque la gente no  cree que son solución publicitaria. ¿Por qué otra razón? Las cifras que ellos presentan son falsas, de falsedad absoluta, incluso, el mismo domingo publican cifras en tendencia a la baja sobre El Telégrafo, tomando como referencia el 2010, que fue el año en que se dejó de regalar ejemplares. Y en cambio, el lunes 9 de julio cuando se refieren a la declaración del Impuesto a la Renta nos ponen hasta el 2012 con una línea ascendente para decir que vamos demasiado bien porque el Estado nos favorece.

¿Y la lectoría?

Ellos han descendido, de acuerdo con las encuestas que ellos mismos contratan, entre un 22 y un 25% en los últimos cinco años.

¿Por qué este fenómeno?

Porque la gente ya no les cree, y el presidente Correa los ha desnudado de cuerpo entero. Mucha gente opina que se han dedicado a proteger sus negocios paralelos y han olvidado que la información es un derecho de tercera generación, agréguele la proliferación de información electrónica a la que miles de personas tienen acceso.

¿Pero esto es una barbaridad?

Es tan ridículo que hasta llegaron a negar que diario El Telégrafo sea el más antiguo de Ecuador y se autocalificaron ellos mismos como el diario más antiguo del país.

¿Por qué se preocupan tanto de El Telégrafo y de Editogran?

Porque Editogran imprime 20 millones de libros y revistas al año, además de guías telefónicas. Todo ello antes era impreso por  empresas privadas. Es por eso el llanto, por el dolor causado en sus bolsillos. El Presidente  ha dicho: si los medios públicos son mal utilizados, cada vez que haya elecciones el pueblo castigará al gobernante que los mal utilice, mientras que en ciertos medios privados jamás van a entregar la cabeza porque de generación en generación vienen sosteniendo infundios, calumnias y tapando cosas oscuras cuando no les conviene que se sepan.

¿El Ministerio de Educación ha manifestado cómo se siente con el servicio y calidad de los productos de Editogran?

El Ministerio de Educación está satisfecho con nuestro trabajo, es más, no solo satisfecho sino que ha ahorrado cifras importantes. Editogran sostiene una operación con la modesta utilidad que se margina, eso es eficacia...

¿Cómo ve usted la situación?

Muy sencilla, ellos tienen entre 90 y 100 años circulando. Van decreciendo en estos últimos años y están desesperados. El Telégrafo y PP van creciendo gradualmente. No han dejado de subir y ese es el dolor, el llanto, el grito desgarrador de angustia. Me apena.

¿Cómo están los diarios?

Mire, los negocios de la prensa independiente han sido publicados por El Telégrafo y PP El Verdadero. Los WikiLeaks, la influencia de la Usaid, los negocios telefónicos de la prensa “independiente” fueron dados a conocer al país gracias a estos dos diarios que luchan en igualdad de condiciones técnicas solo desde hace un año y medio. Los escándalos de las telefónicas y otros negocios oscuros en los que se ha visto involucrada la prensa independiente han sido revelados por El Telégrafo y el PP y por eso es el odio, el engaño, el amarillismo (mienten para vender). El Telégrafo y el PP crecen todos los días, mientras muchos de ellos bajan y bajan todos los días. Ellos saben a quienes me refiero.

¿Por qué critican a los PCD de circulación y de cortesías financiadas?

Porque no los entienden; es más, ellos lo tienen (el mismo sistema) y regalan ejemplares en PML (ver foto), que significa Puntos Múltiples de Lectoría (aeropuertos, hoteles, etc.). Pero igual hacen planes comerciales de los cuales tengo copias y a los que llaman BTL. Cuando ellos lo hacen son buenos, son geniales, cuando lo hace Editogran somos malos. Simplemente es doble moral.

¿Doble moral?

Hasta ahora el presidente Correa espera las cartas rechazando la publicidad estatal, pero  hasta ahora no llegan, simplemente jamás las harán llegar porque no les conviene.

¿Qué paso con estos diarios independientes?

Van a ganar el premio Nobel de Química: transformaron un negocio sólido de prensa escrita, que llevaba cerca de 100 años y  bajaron a menos de la mitad la participación total de la prensa escrita en  la torta publicitaria. Son geniales. Transformaron un gran negocio en un negocio a punto de desaparecer.

¿Qué tipo de empresa es Editogran?

Editogran es una compañía anómima, cuyo capital suscrito pertenece en un porcentaje mayor al 50% al Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información. Bajo esta perspectiva debe entenderse que su giro empresarial debe someterse a las disposiciones de la Ley de Compañías, del Código de Comercio, del Código Civil, del de Trabajo y en general al régimen legal aplicable a las personas jurídicas de derecho penal, para de esta forma lograr altos índices de eficiencia, productividad y competitividad en el mercado.

¿Y sobre la información que Editogran está obligada a dar?

Según el Art. 3 de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública (Lotaip), Editogran debe publicar o conceder información únicamente sobre el destino y manejo de los recursos del Estado y no sobre el manejo financiero, administrativo de la empresa privada.

¿Y sobre la contratación directa con entidades del Estado?

La razón para que las entidades públicas contraten directamente con Editogran se soporta en la disposición contenida en el numeral 8 del art. 2 de la ley orgánica del sistema nacional de contratación pública, así como en el Art. VII del reglamento general de la Ley orgánica de Contratación Pública.