Después de superar algunas dificultades geológicas, la excavación del túnel de conducción o II Fase está prácticamente concluida en el proyecto hidroeléctrico Coca Codo Sinclair, la obra más ambiciosa del Estado ecuatoriano ubicada entre las provincias de Napo y Sucumbíos.

El Coca Codo Sinclair dotará al país de 1.500 megavatios (MW) de potencia instalada, lo que representará el 36% del consumo nacional y supera a la represa de Paute que produce 1.110 MW.

La obra ha avanzado un 81% y funcionará en febrero de 2016. Al inicio la hidroeléctrica solo producirá la mitad de su capacidad porque conforme avance la obra se ingresarán paulatinamente las 8 turbinas que la componen, explicó el ministro de Electricidad y Energía Renovable, Esteban Albornoz, durante la conclusión del trabajo de la tuneladora 2 (TBM2).

El miércoles pasado, el vicepresidente Jorge Glas, el ministro Albornoz, el contralor Carlos Pólit y una delegación de asambleístas y demás autoridades ingresaron por la ventana 2, a 1.500 metros hacia el interior de la montaña, para presenciar cómo la tuneladora o topo, de 150 metros de largo y de 9 metros de diámetro de acero inoxidable con aspas cortadoras en espiral, rompía la última pared de roca.

El proceso duró cerca de 15 minutos desde que el vicepresidente, mediante radio, diera la orden a uno de los 7.500 trabajadores que se encontraba al otro lado del túnel para que inicie la perforación. Previamente la roca fue humedecida.

La roca se derrumbó ante la mirada atónita de los trabajadores, estudiantes universitarios, autoridades y medios de comunicación que captaron el histórico momento, después de 927 días  de trabajo desde que la TBM2 o topo ingresó por el embalse Compensador para perforar 13,8 km de longitud hasta la ventana 2.

“Las obras de excavación del Coca Codo están en la etapa final y esto tiene mucho significado porque cada vez hay mayores certezas en la construcción de este proyecto. Las novedades geológicas que tienen normalmente estos proyectos han sido superadas”, dijo el ministro Albornoz.

La tuneladora 2 de doble escudo, TBM S-671 Herrenkneckt de fabricación alemana, ha tenido 3 dificultades importantes durante su trayecto desde febrero de 2013. Por ejemplo, se han encontrado filtraciones de agua y derrumbes de materiales en formación hollín, en un tramo de 310 metros que retrasó el trabajo 39 días; entre diciembre y mayo de 2014 la tuneladora se tardó 167 días en perforar rocas fracturadas; y finalmente entre julio y agosto del año anterior se encontró una fuerte filtración de agua que lograron pasar en 40 días.

El avance promedio mensual, incluyendo los tiempos en condiciones desfavorables, fue de 490 m/mes (desde noviembre de 2012 hasta principios de este mes). El avance máximo logrado en un día fue de 46 metros.

Funcionamiento de hidroeléctrica

La TBM2 ingresó por el embalse compensador el 23 de julio de 2012 y el miércoles pasado salió por la ventana 2 (ver infografía), mientras que la TBM1 inició la perforación por la ventana 2 hacia las obras de captación. De ese tramo faltan 600 metros que se perforarían hasta la primera semana de marzo.

El túnel de conducción es la segunda fase de las 5 etapas que tiene la hidroeléctrica. Las otras son captación, embalse compensador, tuberías de presión y casa de máquinas.

En la captación estaría una esclusa (obra hidráulica), por donde pasará parte del curso del río (unión del Salado y Quijos), recolectando agua hacia una tubería subterránea.

En esta parte, al no represar el agua, el impacto ambiental será mínimo. Según el gerente general de la empresa pública Coca Codo Sinclair, Luis Ruales, esta sección  ha avanzado el 75,48%.

Después, para generar la presión necesaria, el agua recolectada debe ser trasladada hacia el embalse compensador por medio del túnel de conducción que está a 500 metros bajo la montaña. Concluido el primer tramo de este túnel lo que resta es un 11,79%.

En el embalse compensador, con un progreso del 81,40% el agua se represará durante el día y se precipitará en caída libre 620 metros por 2 tuberías de presión hacia la casa de máquinas. Allí las tuberías se ramificarán en ductos que alimentarán a las 8 turbinas.

El proyecto está a cargo de la empresa china Synohidro y el costo es de $ 2,2 millones (incluida la fiscalización).