Ciento sesenta y siete metros cúbicos de madera fueron decomisados en Esmeraldas durante los primeros  días del estado de excepción decretado por el presidente de la República, Rafael Correa.

Personal del Ministerio del Ambiente, con el apoyo de miembros del Ejército, efectúan controles en distintos puntos de la provincia.

Las Fuerzas Armadas aportan con un millar de hombres en esta región para frenar la tala ilegal en los bosques nativos.

El decreto 116 prohíbe la emisión de permisos de aprovechamiento forestal nativo y la renovación de los existentes por 60 días.

Cincuenta técnicos en materia forestal están a cargo de los cinco frentes que maneja la cartera de Estado para las inspecciones y auditoría de las autorizaciones.

Entre esos frentes en ejecución hay controles fijos en carretera, en los que los funcionarios verifican si la madera que se está transportando es legal o ilegal. Para el efecto, chequean y autentifican los permisos y guías ambientales.

Además, hay controles móviles en determinadas vías identificadas como de tráfico.