Correa plantea sanciones a Reino Unido por las Malvinas
Caracas.-
Durante la reunión de presidentes de la Alianza Bolivariana de los pueblos de América (ALBA), inaugurada ayer en Caracas, el mandatario ecuatoriano Rafael Correa propuso que la región imponga sanciones a Reino Unido por su negativa a acatar las resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas.
El gobernante hizo referencia al pedido de la ONU para que Reino Unido y Argentina dialoguen sobre la soberanía de las Islas Malvinas, actualmente bajo dominio inglés.
“Es momento de que América Latina decida sanciones contra ese desubicado poder que pretende ser imperial y colonialista en el siglo XXI, creo que debemos ir a cosas más contundentes”, afirmó Correa.
“Si algún país de América Latina desobedeciera una resolución de la ONU ¿cuántas sanciones ya no hubiera recibido?”, se preguntó.
La cumbre del ALBA contó con la presencia además del canciller argentino, Héctor Timerman, y de los presidentes de Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Cuba: Hugo Chávez, Evo Morales, Daniel Ortega y Raúl Castro, respectivamente. También estuvieron mandatarios de países caribeños.
Cuba
Por otra parte, los miembros de la ALBA, decidieron someter a estudio su participación en la Cumbre de las Américas de Cartagena (Colombia) si Cuba no va a esa reunión.
“Desde ahora propongo que si Cuba no va, no es invitada a esa Cumbre de las Américas, ningún país del ALBA, por lo menos el ALBA (...) asista a dicha cumbre”, dijo Correa. En ese encuentro, que se realizará en junio, está prevista la presencia del presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
El presidente ecuatoriano recibió el apoyo de sus colegas, pero dejaron para una próxima reunión de cancilleres fijar posición sobre el tema.
“Yo estoy de acuerdo contigo, Rafael, si a Cuba no se la invita a la Cumbre de las Américas, y espero que esto no vaya a alterar las relaciones con el Gobierno de Colombia, no tiene nada que ver con Colombia, nosotros consideremos no asistir a esa cumbre”, dijo Chávez.
No obstante, sugirió que el ALBA se dirija a “consultar al Gobierno de Colombia, que es el anfitrión, a ver si tiene previsto invitar a Cuba, porque hasta ahora estamos hablando de un supuesto”, señaló.
Correa también pidió que el tema de las Malvinas sea analizado en reunión. Y aclaró que si Cuba no asiste, la cumbre no debería llamarse de las Américas sino “Diálogo con Estados Unidos y Canadá”.
Será el Consejo Político del ALBA, integrado por los cancilleres el que analice los planteamientos de Correa, que en un primer momento tuvieron el apoyo de sus colegas.
El gobernante boliviano, Evo Morales, propuso que los jefes de Estado vuelvan a reunirse en La Habana un día antes de la Cumbre de las Américas.
En este punto Correa debatió y dijo que la reunión es viable pero debe realizarse con mayor antelación para coordinar una mejor estrategia como bloque.
El presidente cubano, Raúl Castro, agradeció el gesto de Correa. “Nosotros jamás hemos reclamado que se tome una medida como esa, pero no por eso vamos a dejar de apoyar esta que consideramos muy justa. Quiero agradecérselo a todos”, dijo el presidente cubano.
Haití
En otro punto, el bloque aprobó un plan especial de ayuda a Haití, con la salud y la educación como prioridades. Además fijaron una reunión de cancilleres para abordar el tema los próximos 2 y 3 de marzo en la ciudad haitiana de Jacmel.
El plan de cooperación y desarrollo denominado ALBA-Haití sitúa al pueblo y al Gobierno haitianos como “protagonistas” y busca atender especialmente materias como la salud, la educación, la energía, la producción agroalimentaria o las infraestructuras, indicó el canciller cubano, Bruno Rodríguez.
Reforzando las acciones que la ALBA decidió emprender el 25 de enero de 2010, tras el grave terremoto que azotó la isla, este plan especial también expresa la importancia de que la comunidad internacional haga “un aporte urgente, sustancial y desinteresado al pueblo haitiano”.
El presidente haitiano, Michel Martelly, quien asistió como “invitado especial permanente” a la cumbre de la ALBA, agradeció la ayuda de los países de este mecanismo regional y dijo que “con su apoyo, sí se puede” combatir los altos índices de pobreza del país.
“La solidaridad que tenemos aquí es la que necesitamos porque es la que llega directamente al Gobierno”, dijo el canciller haitiano, Laurent Lamothe, tras recordar que la mayor parte de la ayuda internacional que llega a Haití es administrada por las ONG y no por el Ejecutivo.
Por otra parte, mostró el “ánimo” con el que el Gobierno haitiano afronta la reunión de cancilleres los 2 y 3 de marzo en la ciudad de Jacmel, que quieren convertir en polo de turismo.