El presidente de Uruguay, José Mujica, inauguró hoy en Montevideo la sesión plenaria de la XLII Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur, marcada trágicamente por la muerte de un subsecretario argentino que participaba en la reunión.

Pocas horas después de la muerte del subsecretario de Comercio Exterior argentino, Iván Heyn, y tras una reunión previa a puertas cerradas de los presidentes que se prolongó por más de cuatro horas, Mujica tomó primero la palabra para dar inicio formal al encuentro en la sede del Mercosur en la capital uruguaya.

En la cumbre estaba previsto que el grupo analizará el proceso de adhesión de Venezuela al bloque y la posible asunción de medidas proteccionistas frente a la crisis mundial.

Antes del inicio de la sesión los cancilleres de los países del bloque firmaron un acuerdo de libre comercio con Palestina, que coloca al Mercosur como el primer mecanismo de integración en suscribir un convenio de esas características con los palestinos.

En la sesión plenaria participan las presidentas de Argentina, Cristina Fernández, de Brasil, Dilma Rousseff, y los gobernantes de Paraguay, Fernando Lugo, y Uruguay, José Mujica, los países que son miembros plenos del grupo.

También asisten el mandatario venezolano, Hugo Chávez, y el ecuatoriano, Rafael Correa, cuyo país estudia pasar del estatus de asociado al de miembro pleno.

Mujica, cuyo país transferirá a Argentina la presidencia semestral del bloque en la cita montevideana, destacó los "resultados positivos" conseguidos por el grupo en sus 20 años de existencia, "a pesar de las inmensas dificultades del exterior".

También pidió contrarrestar la "enorme asimetría" reinante en el bloque por las diferencias de tamaño entre los dos socios más grandes, Argentina y Brasil, y los dos más pequeños, Paraguay y Uruguay.

La cumbre de Montevideo viene precedida por las idas y venidas de los países del bloque sobre la posible incorporación como miembro pleno de Venezuela, iniciado en 2006, aprobada por los poderes Ejecutivos de los cuatro países, y por los Legislativos de Argentina, Brasil y Uruguay, pero trabada en el Parlamento paraguayo.

A propuesta de Uruguay, y con el respaldo abierto de Argentina y Brasil, y menos claro de Paraguay, los cancilleres de los cuatro países acordaron el lunes en la reunión del Consejo del Mercado Común que los presidentes anunciarán hoy una postura política para avanzar en ese proceso.

La propuesta, de la que se conocen pocos detalles, ha sido mal recibida por la oposición paraguaya, que controla el Parlamento, y también por la uruguaya.

Ambas han amenazado con realizar juicios políticos a sus presidentes por considerar que se trata de una violación de las respectivas constituciones.

En cuanto a Ecuador, a pesar de que en días pasados Correa anunció que en esta cumbre podría presentar formalmente su petición para formar parte del bloque, hoy aclaró que ese pedido todavía está en estudio.

A pesar de que los planes de ampliación del grupo han acaparado hasta ahora la atención de la cita, también existe interés en saber en qué quedará el supuesto plan de Argentina y Brasil de aumentar el arancel externo común del grupo para blindarlo ante la crisis económica internacional.

La iniciativa en danza, impulsada inicialmente por Brasil, prevé que las alícuotas de los derechos de importación podrán ser elevadas siempre que no se supere el máximo consolidado por los socios en la Organización Mundial del Comercio, del 35 por ciento. EFE