Los clientes de la empresa inmobiliaria Habitavia Home protestaron la tarde del jueves en los exteriores de la empresa, exigiendo la devolución de los dineros depositados en los proyectos de vivienda que no han sido entregados.

Uno de los supuestos afectados es Geovany Espinoza. Su madre canceló a la inmobiliaria 8.180 dólares en marzo y mayo de 2012, por una vivienda de 25.500 dólares que sería construida en el conjunto Arkantos II, ubicada en el sector del puente tres. La casa debía ser entregada en un plazo máximo de seis meses.

Sin embargo, siete meses después de entregado el dinero, la construcción ni siquiera ha empezado. A Espinoza le dijeron que la empresa tenía problemas para obtener los permisos municipales. “Nadie sabía qué  había comprado, ni la nomenclatura, ni el sector”, se quejó.

Representante dijo que se adelantaron a construir sin permisos para no quedar mal con los clientesLa empresa ofreció a sus clientes entregarles un departamento, no una casa, con un valor superior al pactado que no reunía características habitables. La familia ha solicitado la devolución de su dinero. Según los Espinoza, las autoridades les han respondido que no tienen clara la situación de la compra de su inmueble.

En otro caso, hace un año y medio, Miriam Chávez entregó 8 mil dólares por una vivienda en el sector La Armenia, pero  le manifestaron que la casa que  adquirió ya había sido entregada a otra persona. Por eso le ofrecieron otra vivienda en un terreno que ni siquiera está comprado.

Según el representante legal de Habitavia Home, Henry Bonilla, quien también es propietario de Desus Nova y Vía Vivendi, las tres empresas son intervenidas -por segunda vez- por la Superintencia de Compañías. Él  desconoce los casos de las personas que reclaman su dinero.

Según el empresario, el patrimonio con el que cuenta es de 3 millones de dólares y tendría un máximo de 300 clientes. “Si tenemos que devolver dinero, los clientes igual tendrían  que pagarnos porque se maneja por flujo, existen penalizaciones tanto para la empresa como para el cliente en los contratos”.

Bonilla reconoció que en algunos casos no tienen los permisos municipales. Alfredo Aguilar, abogado de los clientes, aseguró que, según la ley, se comete el delito de estafa cuando se ofertan viviendas sin tener los permisos necesarios.