Ciudadanos fueron obligados a participar en la concentración
Cientos de personas desfilaron ayer en conmemoración del Día del Trabajo, en un contexto de marcada división política.
Representantes de sindicatos nacionales, grupos universitarios y partidos de extrema izquierda opositores al régimen, convocaron a sus militantes para rechazar la consulta popular del próximo 7 de mayo.
En el trayecto se evidenció un alto porcentaje de deserción, en comparación a las miles de personas que partieron desde El Ejido.
Rosa Ángulo indicó que algunos trabajadores estuvieron presentes por obligación y asistieron para evitar sanciones y descuentos.
A las 11:00, poco a poco, los manifestantes se concentraron en la plaza de San Francisco, en Quito, pero esta vez no se observó la fuerte presencia de sindicatos y organizaciones sociales, cuya posición está marcada por la división política.
El líder sindicalista Mesías Tatamuez aclaró que su lucha por la reivindicación laboral no es solo esta fecha, a tiempo que reiteró que no están apegados a ningún partido político. “Aquí estamos los que por convicción votaremos No”, dijo.
La marcha fue pacífica en todo su recorrido, pese a que en un punto se encontraron con la manifestación que apoya el proceso de consulta popular, pero no se registraron incidentes.
Esta marcha fue encabezada por el Movimiento Popular Democrático, Pachakutik, la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y los movimientos sindicales.