Chevron presentó supuestas nuevas evidencias para frenar fallo
La petrolera estadounidense Chevron informó hoy que presentó una demanda enmendada ante el tribunal federal de Nueva York relacionada con el juicio que le enfrenta a Ecuador por un caso de contaminación ambiental.
La firma californiana explicó que han descubierto "nuevas evidencias de fraude en el texto de la sentencia (dictada al respecto) en Ecuador", señalaron en un comunicado de prensa.
En febrero pasado una corte en Ecuador emitió una sentencia por la que Chevron (que luego apeló esa decisión) tiene que pagar 9.500 millones de dólares por daños medioambientales en la Amazonía.
Los representantes de la petrolera estadounidense agregaron que ahora presentaron "nuevas pruebas de actos ilícitos por parte de los abogados de los demandantes y de la corte ecuatoriana" con relación al juicio que se sigue en este país y con las que la firma busca detener la ejecución y el reconocimiento de una sentencia que califica de fraudulenta.
Segun Chevron, las enmiendas presentadas "citan pruebas descubiertas recientemente que demuestran que los abogados y consultores de los demandantes de Lago Agrio (Ecuador), como mínimo, ayudaron en forma clandestina a la corte ecuatoriana a redactar la sentencia en contra de Chevron".
El pasado 7 de marzo, un juez de Nueva York decidió impedir la ejecución de la sentencia ecuatoriana, y un mes antes, un grupo de expertos de la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya prohibió temporalmente la aplicación de cualquier sentencia que dictara el tribunal ecuatoriano contra Chevron.
Asimismo, la firma explicó que esas pruebas proceden de archivos de los abogados "de los demandantes de Lago Agrio y sus conspiradores", al tiempo que señaló que en ellos hay "numerosos y peculiares errores" que son los "mismos que ahora aparecen en la sentencia de la corte ecuatoriana, aunque jamás se han incluido en el expediente del caso".
El vicepresidente y director jurídico de Chevron, R. Hewitt Pate, señaló que "no hay justificación aparente sobre cómo la sentencia podría haber incorporado estos errores e irregularidades sin la cooperación entre la corte ecuatoriana y los representantes de los demandantes".
Pate consideró que ello es "otro ejemplo del fraude y la corrupción que han empañado los procesos judiciales en Ecuador".
La petrolera señaló algunas de las similitudes entre la sentencia y los archivos privados de los demandantes, como que la decisión judicial "utiliza repetidamente un esquema de denominación irregular para el muestreo de datos que es exclusiva a los patrones utilizados en los archivos privados de los abogados de los demandantes de Lago Agrio".
También indicó que coinciden en que "los archivos internos reemplazan erróneamente microgramos por miligramos en ciertos informes de muestras y la sentencia presenta el mismo error para las mismas muestras".
Agregan también que "los archivos privados de los abogados de los demandantes de Lago Agrio presentan datos de manera tal que pueden hacer que los resultados de ciertos análisis indiquen la presencia de mercurio, a pesar de que los informes reales del laboratorio muestran que no se detectó" ese metal.
"La sentencia repite errores que aparecen en otros documentos internos preparados por los abogados de los demandantes de Lago Agrio y sus conspiradores, inclusive citaciones que refieren a páginas erróneas del expediente de la corte ecuatoriana y otros errores gramaticales y sustanciales", añade la firma.
El caso que enfrenta a Chevron y Ecuador data de 1993 cuando comunidades de la Amazonía de ese país, tutelados por abogados estadounidenses, demandaron a Texaco por la contaminación ocasionada entre 1964 y 1990 en unas 480.000 hectáreas de selva en la Amazonía, así como por daños irreversibles al ecosistema y enfermedades graves en sus habitantes.
La petrolera californiana, que adquirió posteriormente a Texaco, insiste en que ambas partes alcanzaron previamente un acuerdo que exoneraba a Texaco y a sus filiales, incluida Chevron, de toda responsabilidad ambiental futura.