La municipalización del transporte no está especificada dentro de las competencias exclusivas otorgadas a los cabildos por el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización (Cootad).    

Sin embargo, los gobiernos seccionales tienen la potestad para elegir esta función, explicó Pablo Vélez, especialista en Derecho Municipal.

Los alcaldes pueden hacer uso del artículo 33 de ese cuerpo legal, el cual les otorga la facultad de planificar, regular y controlar el tránsito y el transporte terrestre dentro de su territorio.

Incluso, los gobiernos regionales pueden tener esta competencia “siempre y cuando no la hayan asumido los municipios”.

Para ello, explicó Vélez, se requiere reformas a las ordenanzas que regulan las direcciones y empresas de tránsito dentro de las alcaldías. “Deben contar con los recursos para realizar la gestión como se haría con cualquier obra”.

Entre los rubros que podría manejar directamente el Cabildo están la compra y mantenimiento de vehículos, y sueldos de personal.

El Municipio de Guayaquil administra actualmente el sistema de transporte Metrovía, pero solo invirtió $128’453.490 en la infraestructura de las rutas troncales, desde 2006.  

Las unidades fueron adquiridas por los consorcios participantes (Metroquil, Metroexpress y Metrobastión).

El sueldo de los transportistas, en este caso, se administra dentro de un fideicomiso manejado por la empresa Futurfid, que fue contratada por la Fundación Metrovía.