Veredas complican la vida diaria del peatón
Las veredas que no están en las zonas regeneradas todavía representan un tramo difícil de sortear para las personas que tienen algún tipo de discapacidad, especialmente, para quienes deben utilizar sillas de ruedas o muletas para movilizarse.
La regeneración urbana y las obras ejecutadas por el Municipio de Guayaquil cumplen las especificaciones técnicas para que las veredas y los parques sean accesibles para el usuario.
Sin embargo, en un recorrido realizado por este diario, se constató que hay lugares, especialmente en las periferias del sur y norte de la urbe, que resultan inaccesibles para las personas con discapacidad.
En las calles Quisquís (centro), Guillermo Pareja (Alborada, norte), Cayetano Tarruel (Los Esteros, sur), entre otras, las veredas están invadidas con otras estructuras o no hay rampas de acceso.
En Mapasingue Este, en el límite con la cooperativa Quisquís, existe un contraste en cuanto a las aceras que están en ambos lados de la calle Alianza.
En la acera correspondiente a la Quisquís se observan rampas que cumplen los requerimientos técnicos: ancho mínimo establecido por la norma INEN 2243:2009 (1,6 m) y están libres de obstáculos. Pero en el lado de Mapasingue Este se ven varias irregularidades en el trayecto (falta de rampas, escaleras pronunciadas, invasión de aceras, entre otras).
Germán Yépez, coordinador del Consejo Nacional de Discapacidades (Conadis) en Guayas, citó que, según la Ley de Discapacidades -vigente desde el mes pasado- las instituciones públicas y privadas, en el plazo de un año, deberán adecuar sus edificaciones, de lo contrario serán sancionadas.
Yépez recordó que se han enviado oficios a varias entidades para que tomen en consideración las observaciones en instalaciones como la Terminal Terrestre de Guayaquil y Universidad de Guayaquil.
En cambio, sobre las especificaciones físicas para las vías de circulación peatonal (calles, aceras y pasos elevados), precisó que se está analizando el nuevo Reglamento a la Ley de Discapacidades, el cual estaría listo en las próximas semanas para ser entregado al Ejecutivo. “La próxima semana habrá una convención nacional de todas las coordinaciones del Conadis para tratar aspectos de la ley -de discapacidades- y el reglamento”, afirmó.
Según Yépez, el Cabildo es directamente responsable de que las aceras se encuentren libres de obstáculos y sancionar a quienes construyan en estos sitios sin autorización.
La concejal Grecia Cando, de Madera de Guerrero, reconoció que existen deficiencias en cuanto a la cobertura de aceras amigables, pero, añadió, está en desarrollo un plan para cumplir con los derechos del grupo de atención prioritaria.
El Municipio, según Cando, hace varios años aplica ordenanzas sobre el acceso en las infraestructuras que se gestionan. “La ejecución de este tipo de obras, en el futuro, es inminente tomando en cuenta los índices de discapacidad en el país y estamos haciendo acercamientos con varias instituciones para que colaboren en esta tarea”, explicó.
La edil exhortó a la ciudadanía para que cumpla lo establecido en las ordenanzas municipales sobre accesibilidad para personas con discapacidad y adultos mayores. El estatuto correspondiente cita que la sanción a los infractores dependerá de un informe de la Dirección de Urbanismo, que establecerá la multa considerando la gravedad de la contravención.