La comunidad Sacachún, en la provincia de Santa Elena, prepara una serie de festejos con motivo del retorno del monolito San Biritute previsto para el 16 de julio.

El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, mediante oficio, autorizó la baja del monolito prehispánico como bien municipal y dispuso el cambio de custodia a favor de la comuna peninsular.

San Biritute fue hallado en el cerro “Las Negritas”, junto con ocho esculturas de hombres y mujeres desnudos de piedra, de 8,55 m, y con una circunferencia de 1,47 m, en su parte más ancha.

Su peculiar nombre proviene de la palabra latina virtutis, que significa masculinidad u hombría.

En Sacachún, comuna de la parroquia Julio Moreno del cantón Santa Elena, capital de la ahora provincia homónima,  han corrido desde que en 1949 el tótem San Biritute fuera descubierto por Francisco Huerta y que la exclamación, en un latín popular “Santa virtute” de Carlos Zevallos, se transformara en su nombre oficial por culpa de la mala escucha popular.

En realidad esos fenómenos vinieron luego de que en 1952, por disposición clerical de la Diócesis se retirará el famoso tótem fálico para “extirpar la idolatría”.

Luego, por órdenes del entonces alcalde de Guayaquil, Carlos Guevara, y con ayuda de la fuerza pública se separó a San Biritute de su lugar de origen y se lo exhibió en 10 de Agosto y Pedro Carbo, a la intemperie, sin que caminante alguno pudiera darse cuenta de su valor, sin alzar la vista y hacerle una reverencia o siquiera una mueca al ídolo de piedra.

San Biritute fue sacado en 1969 y desde hace 44 años fue traído en la que se llamaría Avenida de los Dioses (avenida 10 de Agosto). Posteriormente pasó a las bóvedas del Museo Municipal.

Desde 1993 los pobladores de Sacachún formalizaron el pedido al entonces director del museo, Paco Cuesta, de que el monolito fuera devuelto a su lugar de origen, el que retomaron a inicios de este año con el apoyo del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC).

Esteban Delgado, director del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), Regional 5,  informó que ya se ha adecuado el entorno para el regreso de San Biritute para evitar que el mencionado monolito se desgaste con el tiempo.

“El instituto hizo análisis técnicos y se contrató a especialistas que llevaron a cabo los estudios de la tierra y determinaron que era perfectamente viable que el ídolo permaneciera a la intemperie”, explicó el funcionario.