La falta de señalización y de seguridad son algunas de las  quejas de los moradores del plan habitacional Mucho Lote 1, en el noroeste de la urbe. Ellos han solicitado a las autoridades que les den solución a esos problemas que les acarrean continuos accidentes de tránsito y robos en sus viviendas.

En varias etapas, donde habitan miles de familias, los moradores están disgustados por la falta de control del tráfico de vehículos, pues los automotores pasan a alta velocidad e irrespetan los discos de “Pare” colocados en las intersecciones de las vías.

Además, en el redondel localizado en la quinta etapa del plan habitacional, donde convergen los canales de Mucho Lote y Orquídeas (avenida 33 y calle 24 A), se registran embotellamientos por falta de semáforos.

En un recorrido realizado por este diario se constató que tampoco hay control del comercio autónomo, que se desarrolla, incluso, al pie del canal que viene desde Orquídeas. Joaquín Lema tiene un año viviendo en la quinta etapa de Mucho Lote e instaló un modesto puesto de abarrotes dentro de su casa.

El inmueble de Lema está ubicado casi en la esquina del redondel y tiene una vista amplia del tráfico del lugar. “Los embotellamientos son cotidianos, especialmente durante las horas pico, porque aquí no hay semáforos”, se queja  Lema.

Por el lugar transitan líneas urbanas de transporte (143, Orquídeas 1 y 2) y una ruta de los alimentadores de la Metrovía. En el lapso de 09:00 a 11:30 las vías permanecen casi despejadas.

Sin embargo, a partir de las 12:00 hasta casi las 14:00, el tráfico aumenta. “Si viene a las 06:00 es peor aún”, comenta Xavier Cárdenas, quien tiene 4 años viviendo en la sexta etapa.

El ciudadano aseguró que los vecinos han mantenido reuniones para solicitar la colocación de un rompevelocidades que evite que los vehículos, incluso pesados, pasen a alta velocidad.

Cárdenas también se siente preocupado porque ninguna entidad pública ha atendido su requerimiento para que se reemplace un poste de alumbrado público.

La estructura en mención, ubicada al pie de la casa de Cárdenas, luce cuarteada en su base y está inclinada hacia el lado de la vereda. “En el Municipio me dicen que es competencia de la Categ, en la Categ me dicen que los valores por alumbrado público los asumió el Municipio... total, nadie se hace cargo del problema”, afirma Cárdenas.

Por el sector de Mucho Lote que limita con las Orquídeas, también se irrespetan los horarios de recolección de Puerto Limpio (martes, jueves y sábado, a las 20:00) y la basura aparece todos los días. Incluso se observan materiales de construcción abandonados en los sitios donde se ubican los desechos.

Otro problema que perjudica a los moradores, especialmente a aquellos que instalan negocios, son los  robos que se registran “cada dos o tres días”, según Jenny Saltos, habitante de la cuarta etapa.

Varios ciudadanos del sector aseveran que los delincuentes se transportan en motos y tricimotos y que siempre huyen con dirección hacia Bastión Popular. “Lo más seguro es que también tienen gente infiltrada en Mucho Lote, porque he sabido de inquilinos que alquilan por solo un par de meses y se cambian a otra etapa”, señala Saltos.

Robert Hernández, en la quinta etapa, también precisa que las luminarias de la calle 24A NO están defectuosas en algunos tramos y que “a pesar de ser un lugar peligroso, no existe un solo ojo de águila que monitoree la zona”.

Un comerciante de la séptima etapa, en la calle 24B -en el límite de Mucho Lote con Bastión Popular-, quien solicitó el anonimato, también protesta  por la presencia de un grupo de taxistas particulares -cuyos vehículos son de varios colores, menos amarillo- que hacen estación cerca de su casa.

Los mencionados choferes, según el ciudadano, durante los fines de semana se instalan a consumir bebidas alcohólicas y hacer bulla con música a  alto volumen, en plena vía pública.

Los habitantes del plan habitacional también solicitan agilidad a la Corporación Nacional de Telecomunicaciones para que dote del servicio telefónico a todas las etapas.