A través de un escrito, difundido públicamente por el alcalde Jaime Nebot, el funcionario cantonal califica de “desvergüenza legal” las leyes “prodelincuenciales” de las cuales ciertos jueces “hacen uso y abuso”.

El funcionario, en la misiva, en la que asevera que “la situación está llegando al colmo”, pronostica que “jamás disminuirá la delincuencia (en el país), por el contrario se incrementará y afectará a todos sin distingo de condición o región”.

Luego señala directamente al juez Décimo de Garantías Penales, Édgar Macías Guerra, en quien recayó el caso de un ciudadano enjuiciado por ocultamiento de bienes públicos (tacho metálico para recolectar basura, propiedad del Cabildo).

El citado magistrado en la providencia del 27 de agosto de 2012 puso en libertad al acusado, sustituyendo su prisión preventiva por presentarse ante él cada 15 días y tiene prohibido salir del país.

También, cuestiona  el caso de un ciudadano que admitió ante el fiscal de lo Penal, César Ponce Granizo, el hurto de una tapa de fierro de alcantarilla y pidió la aplicación del artículo 37, del Código de Procedimiento Penal, para que se suspenda el proceso y se disponga tratamiento psicológico, asistencia a programas educacionales o pagar una determinada suma al ofendido.

“En el argot popular el mensaje prodelincuencial es claro: en el primer caso, ‘estás libre, sigue robando y visítame cada 15 días’, en el segundo caso, ‘hurté cosa ajena, lo admito, suspéndame el procedimiento, y aquí no ha pasado nada’”, arremete.

Además, el miércoles Nebot anunció que desacatará la disposición de un juez si sentencia a favor de la acción de protección presentada por el consorcio Buen Vivir, que busca anular la adjudicación de la nueva troncal de la Metrovía a otro grupo no hará caso a la justicia. “No voy a acatar esa sentencia”.