En octubre de 2015 el Cabildo cumplirá 3 años y 6 meses de haber recibido la responsabilidad del tránsito (en enero deberán tener vigilantes). Quito y Cuenca tienen el control desde 2013, desde noviembre y abril, respectivamente.  

El alcalde Jaime Nebot condicionó el traspaso de las competencias de control y regulación del tránsito a la entrega de $44,2 millones que deberán ser asignados por parte del Gobierno Nacional.

Insistió en la consulta popular para definir el tema del alza de pasajes. “Va porque tiene que ir” y anunció que el proceso comenzará a marchar a partir del siguiente mes “porque veo que esto no se soluciona”.

Puntualizó que no está condicionando a que los guayaquileños decidan si el Cabildo asume o no las competencias, pero que frente al conflicto de intereses, será la ciudadanía la que resuelva.

Anticipó que incluirá en la consulta si los habitantes del cantón quieren autorizar a la Municipalidad a recibir menos dinero del que le corresponde del Gobierno.

En días pasados, el presidente Rafael Correa advirtió que si Nebot no asume las competencias y coloca agentes de tránsito en las calles a partir del 15 de enero de 2015, lo que se invierte en el personal de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE) asignado a la urbe se descontará de los recursos del Cabildo.

Por su parte, Michel Doumet, director ejecutivo de la CTE, estimó que en los 1.300 efectivos que hay en la capital guayasense se invierte más de $30 millones.

El rubro incluye salarios, movilización, mantenimiento de vehículos, etc. “De los 4.000 vigilantes que tenemos,  el 33% de la nómina está en Guayaquil”.

Enfatizó que la entidad requiere el monto (que invierte el Estado Central) para comenzar labores en otras provincias.  

Nebot desestimó que la Alcaldía de la ciudad sea la única que no completa el traspaso de servicios en cuanto al tránsito. “Si tengo que quedarme solo, yo haré lo que tenga que hacer y solo”, dijo.