El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, confirmó este miércoles que la Arquidiócesis de la ciudad no pidió los permisos correspondientes para la remoción de las cruces en las cúpulas de la Catedral. El pasado domingo, un helicóptero no pudo trasladar uno de los símbolos de la iglesia que cayó en una zona de parqueaderos.

"Debieron haber pedido permiso para hacerlo. Admiten que no han pedido el permiso, no se trata de una obra de lucro (...) pero debieron haber pedido el permiso, no lo han pedido", dijo el burgomaestre en su habitual cadena radial de los miércoles.

Nebot indicó que el Municipio no está obligado a realizar los trabajos de remodelación de la Catedral; sin embargo, "hemos ayudado". Así, adelantó que en las próximas semanas se instalarán acondicionadores de aire en el templo.

El dignatario cantonal aseguró que desde hace meses, la Fundación Siglo XXI está analizando la estructura de la Catedral y "después de que se terminaran estos íbamos a intervenir". Sin embargo, lamentó que la Arquidiócesis se haya adelantado en la remoción de las cruces. "Si se hubieran terminado los estudios, se hubieran dado cuenta de que esas cruces se tenían que haber movido de otra manera", opinó Nebot.

El martes, Rómulo Aguilar, párroco de la Catedral, dijo que los primeros organismos llamados a reparar la iglesia son el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) y el Municipio de Guayaquil. Pero el INPC recordó que, mediante resolución oficial, los cabildos asumieron las competencias de patrimonio cultural local, desde junio de 2015. (I)