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Varios de los guayaquileños encuestados indicaron que prefieren áreas verdes sin puertas metálicas

Los parques con rejas iniciaron con el PSC

El parque San Agustín, en Guayaquil, solo permite los ingresos desde las 07:00 hasta las 22:00, que cierra sus puertas. Foto: Miguel Castro / El Telégrafo
El parque San Agustín, en Guayaquil, solo permite los ingresos desde las 07:00 hasta las 22:00, que cierra sus puertas. Foto: Miguel Castro / El Telégrafo
08 de abril de 2015 - 00:00 - Redacción Guayaquil

César Carbo es uno de los guayaquileños que se oponen a la política municipal de que los parques y plazas de Guayaquil estén cerrados.

En un acto delictivo en su contra descubrió algo que puede ‘jugar’ en contra. Eso le ocurrió cuando escapaba de unos delincuentes que querían quitarles sus pertenencias.  

Al intentar ingresar al parque San Agustín (centro del puerto principal) para burlarlos, no pudo hacerlo porque las puertas estaban cerradas. “Fue un error cercarlo”.

Acontecimientos como el citado y la reciente caída de una pesada puerta de la Plaza del Centenario (que mató a una persona la semana pasada) aumentan las críticas contra la administración municipal del Partido Social Cristiano (PSC), que en los últimos 20 años construye espacios verdes con rejas.

Usuarios consultados prefieren que se reemplacen las cercas metálicas por sistemas de vigilancia.

El ciudadano Javier Ortiz, quien acude diariamente a la Plaza Colón, afirma que las verjas metálicas o de concreto resultan inútiles, pues los delincuentes las escalan sin inconvenientes.

Luis García, propietario de una fuente de sodas cerca del San Agustín, considera que el parque es bonito, pero ahora es cerrado a las 22:00. “No se lo puede disfrutar”, precisó.

El parque de Las Acacias, una de las obras más representativas, solo puede ser visitado de 07:00 a 22:00.

Los transeúntes afirman que los patrullajes que realizan tanto la Policía Metropolitana como la Policía Nacional son suficientes para evitar la presencia de delincuentes en la Plaza de San Francisco y en La Merced (ambas sin enrejados ni horarios de cierre). Es decir, son ejemplos de una política sin rejas.

Mariano Cortés, visitante de la San Francisco, observa que en ocasiones hay personas que pernoctan en el sitio, pero “son inofensivas”.

En la ordenanza presupuestaria  de 2015, el Municipio de Guayaquil designó $ 10 millones para el servicio de seguridad y limpieza de parques y mercados. $ 791 mil son para el servicio de vigilancia de 25 espacios recreativos (en la ciudad existen 3.000).

Los sectores beneficiados se encuentran, la mayoría, en el sur y centro.

Las obras con mayor monto presupuestario son las tres troncales de la Metrovía con una asignación de cerca de $ 4 millones.

Según cifras de la Alcaldía, entre 200 y 2013 se crearon aproximadamente 1.300 parques lo que, a criterio del burgomaestre Jaime Nebot, representó multiplicar por seis la cantidad de estos espacios.

Las comunidades beneficiadas con las obras son las encargadas de dar mantenimiento y seguridad a las mismas para lo cual cobran tasas a los vecinos. (I )

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