El VIH no tiene tratamiento curativo, la única manera de evitar contraerlo es llevar una vida monogámica
Los adolescentes también pueden contraer sida
De acuerdo a un estudio realizado por ONUSIDA en 2011, el 60% de jóvenes ecuatorianos de 15 a 29 años están infectados por el virus del VIH.
En 2012, el Ministerio de Salud Pública del Ecuador realizó la campaña ‘Vamos al cero’, con programas de prevención y control del virus, el cual establece que para 2015 la meta mundial es lograr “cero discriminación, cero nuevas infecciones por VIH, cero muertes por sida”.
La adolescencia abarca entre los 10 y 20 años (según la ONU), y se divide en tres partes: la temprana (11 a 14 años), la mediana (14 a 17 años) y la tardía (17 a 20 años). Entre estos lapsos se inicia la sexualidad y la etapa cognitiva, se desarrolla un aumento de la autonomía y de las relaciones sociales. Se inicia el pensamiento formal, el razonamiento a partir de principios conocidos y se crea un cuestionamiento de todo. Es el momento de la protesta de los adolescentes.
“Los adolescentes tienen una pérdida muy importante de la percepción de riesgo, creen que nada les sucederá y esto está haciendo que curvas que habían empezado a bajar en todo el mundo ahora estén presentando una discreta elevación en estas poblaciones que ya creíamos controlada”, dice la doctora Rosa Polo Rodríguez, jefa de Área Asistencial y de Investigación de la Secretaría del Plan Nacional VIH de España, experta en enfermedades infecciosas del hospital Rey de Madrid y nutricionista comunitaria, quien visitó Ecuador para dar una conferencia sobre esta temática en la Universidad Espíritu Santo.
La mortalidad por sida en jóvenes en la década del 80 era muy elevada, se acercaba al 90%. Sin embargo, ahora, gracias al diagnóstico precoz y a los tratamientos que, aunque no son curativos, mejoran la situación del paciente, el porcentaje de supervivencia ha aumentado. (I)
Las infecciones de transmisión sexual aumentan
“Lo menos que le puede pasar a un adolescente al tener una relación sexual es un embarazo no deseado. Lo peor, contraer sífilis, clamidia, herpes genital, virus del papiloma humano (cáncer de útero en las mujeres y cáncer de ano en los hombres)”, señala Joseph McDermoth, endocrinólogo de la Clínica Kennedy Samborondón. Rosa Polo dice que, según datos propios y de colegas, las infecciones de transmisión sexual han aumentado en países subdesarrollados y desarrollados. (I)