Grace López, desde el portal de su vivienda, ha observado algunos accidentes que se han registrado en la intersección de la A y Nicolás Segovia (suburbio de Guayaquil).
En ese punto existe un agujero en el que motociclistas se caen y donde los automotores se averían.  

López recuerda que en ese lugar había una tapa de cemento (servicio telefónico), pero “los ‘hacheros’ (consumidores de la droga h) se la robaron para venderla y comprar estupefacientes”.

Cuando llueve -agrega- el agua se estanca en la calle, lo cual impide detectar que allí existe un hoyo.

Los vecinos en varias ocasiones han colocado palos en el agujero, para advertir a los conductores, no obstante, “hasta eso se roban”. Hace dos meses existe el problema en ese punto.  

La calle Tungurahua también presenta deterioro. En la intersección con Venezuela las tapas se han hundido paulatinamente.
En esta zona transitan buses y carros livianos. Cuando los vehículos pasan sobre las placas de cemento estas son sacudidas. Parece que las láminas se hundirán en cualquier momento.

José Yagual, ciudadano que trabaja por el sector, cuenta que algunos autos ya se han averiado al circular por el lugar. “En las noches es difícil percatarse de la irregularidad. En ese punto explotan las llantas o se dañan los amortiguadores”.

Además, Yagual hace pocos días vio a un adulto mayor que tropezó en el desnivel. “Si hubiera pasado un carro en ese momento, lo atropellaban. El Municipio de Guayaquil debería hacer algo para prevenir una tragedia”. Los vecinos desconocen cuál es la empresa propietaria de las cubiertas. En el boquete que se formaría puede caber una persona adulta.  

En Tungurahua y Gómez Rendón existe un orificio, pero de menores proporciones. La comerciante Nancy Quinatoa recuerda que ese hueco lleva allí algunos meses. “Existía una tapa, pero se la llevaron repentinamente”.

En días pasados este medio observó igual irregularidad en la intersección de las calles 34 y Portete (suburbio).

En el centro de la ciudad puerto hay hundimientos a lo largo de la calle García Avilés. Precisamente en esta ruta circulan diversas líneas de buses urbanos.

La Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE) el año pasado, antes del traspaso de sus competencias en la urbe, la identificó como una de las zonas de mayor congestionamiento vehicular.

Otro problema observado en la urbe porteña es el de las cubiertas que están sobresalidas. Aquello ocurre en la intersección de Jorge Maldonado y Primera (en Mapasingue Este).

Fernando Baldeón, vecino del sector, cuenta que los autos esquivan el obstáculo, pero en la maniobra se han accidentado. “Acá, además, hace falta un semáforo para que reduzcan la velocidad”.

Según el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización, es competencia del Cabildo mantener en buen estado la vialidad de la ciudad. (I)