Los robos a los visitantes de la zona regenerada del cerro Santa Ana es una situación cotidiana, según moradores de la zona céntrica.   

Según cifras del Distrito 9 de Octubre de la Policía Nacional, mensualmente receptan hasta 5 denuncias de estruches a los turistas que pasean por el sector.

Por esta razón, los vecinos consultados, quienes consideran que la cifra de actos ilícitos es mayor, solicitan que haya más vigilancia en el lugar por parte de las autoridades.

Diego Cañarte, quien reside 30 años en el sitio, aseguró que en el sitio opera, incluso, una pandilla   denominada Poliabismo (nombre con el que se conoce el callejón sexto del sector).

El vecino afirmó que esa ruta, entre los escalones 151 y 152, es la más usada por los delincuentes para llegar a la zona regenerada “y robar celulares y laptops”.

El problema se repite, a pesar de que en la zona hay 18 guardias de la empresa Vielarec -contratada por el Cabildo porteño-, 5 agentes metropolitanos y un miembro de la Policía Nacional (PN).

Lucía Cruz, moradora hace 40 años en el sector, manifestó que el patrullaje de la PN es irregular y que solo aumenta en las festividades o feriados (carnaval, Semana Santa, fundación, independencia de la ciudad, entre otras).

De la misma manera, criticó que los guardias de la Vielarec y metropolitanos no tengan las armas suficientes para enfrentar a los delincuentes. “Les toca pedir apoyo al único policía del lugar”.

Rodrigo Ocaña, jefe del Distrito 9 de Octubre, explicó que el patrullaje que se realiza en el lugar es de carácter preventivo y la respuesta -cuando se registra un ilícito- es inmediata.

El uniformado definió a la zona como compleja porque algunos delincuentes son habitantes de la zona y sus familias entorpecen las investigaciones policiales. Recomendó a la ciudadanía que evite usar smartphones, tablets y laptops en el lugar. El distrito cuenta con 375 gendarmes y cerca de 110 vehículos, entre carros, motos y bicicletas.