El último censo económico del INEC revela que solo en Guayas hay 11.549 establecimientos de hospedaje y servicio de restaurantes. De este total la mayoría se ubica en Guayaquil. Otro dato de la Federación de Cámaras Provinciales de Turismo  (Fenacaptur) señala que en el puerto principal la oferta de habitaciones de hoteles asociados a esta entidad llega a 2.200  y se ampliará a 4.500 en un año y medio, pues se construyen 9 proyectos hoteleros.

Holbach Muñetón, titular de la Fenacaptur, también tiene su hotel e incluso él aumentará los cuartos de 43 a 63. Al parecer la oferta excede la demanda en la ciudad, puesto que el INEC calculó también que solo el 8% de los ecuatorianos que realizan turismo interno en el país escoge a Guayaquil como su destino: esto representa cerca de 440 mil personas anuales. Las cifras del Municipio son diferentes y estima que al año llegan a la urbe hasta 1 millón 200 mil personas, incluyendo visitantes nacionales y extranjeros.

Existe un punto en el que coinciden Muñeton y el Cabildo: el turismo de Guayaquil es en primer lugar de negocios.

Por ello Muñetón considera importante que se defina un buró de convenciones. “Es la única manera de que haya la circulación de turistas día a día. Se fue la feria del reloj y vino la feria de la camiseta, se fue esa y vino la de dermatología, es decir, debe haber una constante”.

Muñetón tiene otra preocupación. Según él, la llegada de turistas ha disminuido en Guayaquil. Si bien no tiene cifras generales, asegura que en esta temporada de vacaciones de la Sierra no ha existido el repunte que esperaban. “Hay hoteles que están en el 55% de su capacidad”.

El representante de la Fenacaptur también sostiene que solo el 35% de los turistas que ‘aterrizan’ en Guayaquil busca hoteles, el resto se hospeda con un familiar o amigo.

Esta es una realidad que ratifica el INEC en su encuesta de turismo interno, pues el 74,6% de ecuatorianos que viaja se aloja en viviendas de familiares o amigos.

Precio vs. calidad

El itinerario del viaje a Guayaquil, generalmente es organizado con meses de anticipación, al igual que las reservas de las habitaciones en los hoteles.

La tarifa en un hotel de lujo puede oscilar entre $ 65 y $ 100 más impuestos, por la noche; o el más económico que va desde $ 11 la noche. Estos precios son solo en temporada alta, es decir de vacaciones o por un feriado.  

Algunos de los establecimientos ‘baratos’ se ubican en el casco comercial de la ciudad. No es mucho lo que se puede conseguir por menos de $ 20. Uno de los hoteles al pie de la avenida 9 de Octubre oferta habitaciones de $ 17,40 más impuestos, por cada noche. Es la más sencilla y cuenta con un ventilador. Por $ 2 más hay una habitación similar, pero con el servicio de aire acondicionado.

La limpieza de los lugares de hospedaje es fundamental y si bien la mayoría de los ubicados en el centro de Guayaquil tienen un ambiente agradable carecen de comodidades de los hoteles de lujo, como gimnasio o servicio de lavandería.

Los baños son por lo general bien cuidados en los principales hoteles de franquicias reconocidas, pero en establecimientos pequeños y económicos, los dueños tienden a descuidar este aspecto.

Los hoteles clasificados como de lujo también presentan promociones para captar a diferentes públicos. 

Juan Carlos Falconí, jefe de reservas y recepción del Hotel Ramada, explica que el sitio tiene 75 habitaciones divididas en categorías estándar, ejecutiva y superior. Cada una cuenta con un minibar, aire acondicionado y dependiendo la elección de la habitación, una vista al río o los laterales del hotel. Además incluye el servicio de piscina, sauna, gimnasio y conexión wifi.

En esta temporada lanzaron un paquete promocional con un valor de $ 85 incluido los impuestos y desayunos tipo buffet, en las habitaciones estándar y ejecutiva. Generalmente estas habitaciones fluctúan entre los $ 100 y $ 120.

Pero también hay otra forma de llegar a los clientes. Menciona que ahora los hoteles manejan canales de reserva a través de internet como Booking, Despegar.com o Expedia, en donde los negocios pueden subir promociones de habitaciones con descuentos.

La mayoría de administradores y dueños de hoteles espera la temporada de finales de junio y agosto con ansias, pues la demanda tiende a subir el 50%. Los viajeros suelen llegar desde ciudades como Cuenca y Ambato, aprovechando la época de vacaciones escolares.

¿Qué le hace falta a Guayaquil para incrementar su turismo interno e internacional? Muñetón propone más promoción y organización de eventos por las fechas cívicas como la Fundación o Independencia. Solo de esa forma “las fiestas de Guayaquil, serán realmente fiestas”, como ocurre en otros destinos extranjeros. (I)