Los desvíos que se implementaron en la avenida Benjamín Rosales, a la altura de la Terminal Terrestre, por la instalación de un ducto cajón prefabricado en la avenida Antonio Parra Velasco, ocasionaron que el tráfico congestionara otras vías del norte de la urbe.

Las avenidas Isidro Ayora, Agustín Freire, Guillermo Pareja y Rodolfo Baquerizo, José María Roura y José María Egas incrementaron su flujo vehicular como consecuencia de la implementación de rutas alternas.

La medida estará implementada hasta que terminen las obras del ducto cajón que se ubicará por debajo del intercambiador de tráfico que construye el Municipio de Guayaquil.

La Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), desde el lunes anterior, distribuyó a varios de sus agentes para evitar congestionamientos en la Benjamín Rosales y calles aledañas.

La Isidro Ayora es la que más registra tráfico vehicular debido a que los carros que antes pasaban directamente a la Antonio Parra, desde la Benjamín Rosales o la de las Américas, ahora deben desviarse por esa avenida que cruza varias etapas de Los Sauces.

Los choferes que deciden tomar la Isidro Ayora deben dirigirse por la José María Roura o José María Egas para retornar a la Antonio Parra.

El tránsito en estas intersecciones provocó que en las vías de La Alborada y Garzota (Rodolfo Baquerizo y Guillermo Pareja) también aumentara el flujo vehicular.

Según estimaciones de obreros que trabajan en el ducto cajón de la Antonio Parra, el cierre parcial de esta avenida será de, por lo menos, quince días más.