El Cabildo y la APG llegan a preacuerdo para dragado de canal
La Autoridad Portuaria de Guayaquil (APG) y el Municipio de la ciudad anunciaron coincidencias en cuanto a las condiciones técnicas en las que se realizará el dragado del canal de acceso a la terminal marítima Libertador Simón Bolívar y la zona Los Goles.
Tras una reunión, que se desarrolló ayer en forma reservada en la zona del puerto (sur de la ciudad), el alcalde Jaime Nebot destacó la apertura de las autoridades para que el Cabildo se haga cargo del dragado.
Pero aclaró que faltarían definir detalles jurídicos para establecer el acuerdo interinstitucional que permita al Gobierno Seccional asumir la competencia. “Hay coincidencias en que se debe dragar el obstáculo de los goles a 11 metros y el canal de acceso al puerto a 11 metros en marea baja (primero se alcanzará una profundidad de 9,60 metros y después se llegará a 11 metros, ambas medidas en marea baja)”.
Para viabilizar el acuerdo, puntualizó Nebot, es necesario actualizar los estudios de factibilidad. Al respecto, Víctor Hugo Yépez, director de servicios de Draga de la Armada, coincidió en que se requiere una nueva investigación de las condiciones de la zona de acceso al Libertador Simón Bolívar.
Actualmente, la Armada posee una draga con capacidad de 1.500 m3 de tolva (dispositivo similar a un embudo destinado al depósito y canalización de materiales granulares o pulverizados) y se encuentra, en proceso, la compra de una nueva máquina por la que ya se pagó un anticipo de $ 2,5 millones a una empresa china. Sin embargo, Yépez aseguró que “si existen mejores opciones habrá que considerarlas”.
Precisamente, en esta semana Nebot anunció una licitación que será abierta una vez que se concrete el acuerdo con la APG y podrán participar empresas nacionales e internacionales. “Estamos conscientes de que la propuesta en materia de dragado es viable”.
Aseguró, públicamente, que la obra será entregada con una auditoría técnica de calidad y profundidad. “Igual al dragado del canal que deberá entregar la APG (9,60 metros en marea baja)”.
En cuanto al cobro de la sobretasa para financiar la iniciativa municipal, Nebot adelantó que existen propuestas, pero el monto fijado será resultado de un nuevo estudio. “Lo que sí está claro es que esa tasa la pagan las compañías navieras”.
El nuevo rubro, según declaraciones anteriores, cuenta con la aprobación de las compañías afectadas, porque se prevé un aumento de la carga en los buques.
Según el burgomaestre, una vez que en los goles y en el canal del puerto se consiga el calado de 11 metros en marea baja (equivale a 13 metros en alta), la terminal será archicompetitiva. “Mientras los puertos de Guayaquil funcionen sin interferencia, sin quererse llevar a dedo la carga, (las entidades estatales) pueden hacer todos los puertos que quieran y donde quieran hacerlo, pero para subsistir tendrán que competir”.
El alcalde recordó que aún solicita respuestas claras y precisas sobre el funcionamiento del puerto y los otros 13 puertos privados. Y acotó que no le tiene miedo a la competencia.
En la reunión estuvieron Juan Carlos Jairala, gerente de la APG; José Miguel Muñoz, gerente de Contecon, operadora concesionaria del Puerto Libertador Simón Bolívar de Guayaquil; la subsidiaria de la filipina Ictsi; Eduardo Peña Hurtado, presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil; y Henry Kronfle, presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil.
Dentro de las instalaciones portuarias también fueron visibles vehículos del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP).
En una cadena televisiva, el miércoles pasado, el alcalde Nebot vaticinó que si se especializa al puerto (en turismo y cabotaje) Guayaquil se convertiría en una nueva Detroit (ciudad estadounidense que se declaró en quiebra semanas atrás).
En Detroit, tras la partida de las empresas automotrices, los ciudadanos comenzaron a irse a otras latitudes en busca de trabajo, lo que a su vez afectó a las recaudaciones municipales. Por lo que los servicios básicos desmejoraron.