Hamilton Emanuel Piedra Ordóñez, nacido en Loja el 20 de febrero de 1993, tiene 22 años y desde los 11 se dedica a jugar fútbol. Comenzó su carrera en el Deportivo Cuenca y actualmente es el arquero titular de ese club. Desde que inició en esta profesión ha tenido sueños y precisamente uno de ellos es llegar a ser el mejor arquero del mundo.

A inicios de 2015 se rumoró que Barcelona quería contratarlo, pero el guardameta había firmado contrato con el Deportivo Cuenca hasta 2019, con lo que se descartó cualquier pretensión de fichaje. En esa ocasión aseguró que le llena de satisfacción que un equipo grande del país se haya fijado en él.

El joven portero ahogó el grito de gol de los amarillos en más de una oportunidad. Sus intervenciones permitieron que el ‘Expreso Austral’ se traiga un importante punto del mismo Monumental.

Uno de los partidos en donde más destacó el joven arquero fue precisamente ante Barcelona en la temporada pasada, en la que realizó grandes atajadas; e incluso uno de sus saques largos y precisos puso frente a frente al delantero José Luis Gutiérrez con Máximo Banguera, para que el artillero resuelva ante la salida desesperada del portero y marque el empate 1-1.

Ese tipo de saques, comenta, los aprendió de todos los arqueros que pasaron por el Deportivo Cuenca. Pero le da mayor protagonismo de esa enseñanza a Esteban Dreer, quien le enseñó a sacar y a tener presencia.

Piedra es de esas personas que dice lo que siente. Asegura que su madre, Luisa Ordóñez, y su abuela, Vicenta Pineda, lloraron de emoción al enterarse de su convocatoria a la selección nacional de fútbol.

A Piedra lo convocó Sixto Vizuete  por primera vez para la selección, para los partidos ante Estados Unidos y El Salvador. Aquello ocurrió hace casi 2 años. Antes ya estuvo en el combinado sub-20 que participó en el Campeonato Sudamericano que se desarrolló en Mendoza, Argentina.

En un fútbol como el ecuatoriano, en donde existen jugadores consagrados y reconocidos internacionalmente, ya sea por jugar en sus equipos o en la selección, ¿quién es Hamilton Piedra?

Un ser humano sencillo, humilde y con muchas metas por cumplir. Siempre me he caracterizado por conseguir lo que me propongo, trabajar muy duro para ser el mejor guardameta del país y darle a mi familia un mejor futuro.

¿Cómo inició su vida en el fútbol ecuatoriano?

Todo comenzó a los 11 años, en la escuela Aurelio Aguilar Vásquez, en la ciudad de Cuenca. Siempre fui portero, un entrenador del Deportivo Cuenca vio mis condiciones y decidió llevarme al club. Entonces desde ahí formo parte del Deportivo Cuenca hasta el día de hoy, que soy el portero titular en el fútbol profesional.

Haber nacido como profesional en un equipo tiene mucha importancia. ¿Qué significa Deportivo Cuenca para usted?

Significa mucho, porque es donde inicié mi carrera profesional y donde me formé como ser humano y jugador. Siempre estaré agradecido porque la dirigencia confió en mí y supo enseñarme lo que ahora soy.

Todo ser humano tiene metas y propósitos que cumplir, ¿cuál es su mayor sueño?

Mi mayor sueño en la vida futbolística es ser el mejor, ir a la selección y jugar en un equipo fuera del país, pero soy consciente de que, para lograrlo, primero tengo que ser mejor persona, un hombre humilde y trabajar mucho como profesional; cuidarme, dedicarme en cada entrenamiento, y escuchar consejos de las personas que me quieren ver crecer.

La vida de los futbolistas es complicada. Muchas veces tiene días buenos y días malos, ¿algún momento duro en su carrera?

Sí, hace tres años sufrí una lesión muy dura para mí. Tan fuerte que algunos doctores incluso me llegaron a decir que ya no podría tapar, que todo dependía de mí, ya que sufrí una luxufractura en mi dedo medio y tuve seis meses de recuperación sin poder entrenar ni jugar. Fue muy duro para mí, pero siempre mantuve las esperanzas en Dios. Gracias a Él, ahora estoy bien y todo pasó.

Las personas hacemos grandes cosas porque existen seres humanos que nos inspiran o motivan, ¿quiénes son sus mayores motivaciones?

Mis mayores motivaciones son las personas que me rodean, Dios, familiares, novia, amigos, y los que quieren estar a mi lado brindándome el apoyo que necesito para trabajar en esta linda, pero a la vez dura carrera.

¿De qué forma se cuida para estar al 100% en cada partido?

Para estar bien en cada partido primero hay que estar bien de la cabeza, ser fuerte, valiente y concentrado; pensar siempre en positivo, evitar los nervios y tener siempre mentalizado antes de saltar a la cancha que vas a ser el mejor del mundo y que en ese encuentro vas a destacar.

Todo futbolista tiene un ídolo o un referente, ¿cuáles son los suyos?

Siempre he admirado a Iker Casillas y a Gianluigi Buffon, porque son arqueros que a punta de esfuerzo y trabajo han conseguido todo. He podido analizar que son personas sencillas fuera y dentro de la cancha, por algo son considerados dos grandes del mundo.

A pesar de tu juventud, ¿crees que ya tienes un logro importante en tu vida?

Mi mayor logro fue haber podido jugar en el campeonato nacional como arquero titular a los 17 años. También ser convocado a la selección en 2014 para un partido amistoso con EE.UU. y El Salvador, en donde, a pesar de no haber tapado, me sentí orgulloso de haber sido llamado como tercer arquero de nuestro país.

¿Existe una motivación especial por ser el arquero más joven del campeonato nacional?

Me siento orgulloso y a la vez feliz por ser el arquero más joven con tan solo 21 años; así mismo, siento una responsabilidad muy grande, ya que al ser joven no poseo muchos minutos en cancha y la experiencia que tienen los otros arqueros, pero me siento confiado y positivo porque cada partido aprendo más cosas que me encaminan a ser mejor cada día.

¿Qué ha cambiado en Hamilton desde que inició esta carrera?

He cambiado mucho en algunos aspectos, sin embargo, el solo entrenar no hace al arquero, sino la experiencia adquirida en cada partido. En los encuentros en los que he participado en primera he ido aprendiendo muchas cosas, por ejemplo: cómo hablar dentro de la cancha, ordenar a mi equipo y, sobre todo, tomar decisiones dentro del campo. (I)