Un grupo de comerciantes de la avenida Delta, cuyos locales están frente a la Universidad de Guayaquil, solicitó un diálogo con el alcalde Jaime Nebot sobre los efectos en el comercio causados por una verja que bloquea los cruces desordenados en la vía.

Esta fue la tercera vez que un oficio con el mismo pedido es entregado en la Alcaldía, pero el funcionario principal de la ciudad no ha respondido a los ciudadanos.

El objetivo de la insistencia es obtener un compromiso del burgomaestre para solucionar la situación de 60 negocios, donde las ventas han bajado hasta en el 80%.

El pasado lunes Nebot, al ser consultado sobre el tema, afirmó que aprobó la petición de los comerciantes de construir un paso peatonal, pero que -entre estudios técnicos, licitación y construcción- tomará tiempo. La verja colocada en la avenida Delta causa molestias, reconoció el alcalde, pero según él solo “para un tercio de los comerciantes que está en ese sector”.

Manuel Salazar, propietario de un centro de copiado, considera que el funcionario es mal asesorado. “60 de los 100 locales que funcionan en la zona están afectados, no un tercio, somos casi dos tercios los que estamos en riesgo de quebrar”.

Los efectos son percibidos desde la calle O’Leary -una cuadra más al norte de Carabobo- hasta Bomboná. Incluso en el centro comercial Paseo Universidad, con pocos años de creación, hay poca actividad.

Richard León hace dos años instaló un ciber donde también saca copias, a tres cuadras del paso peatonal señalizado por la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM).

De los 19 locales del espacio comercial, seis están cerrados hace dos semanas. “Ya algunos deben hasta dos meses de alquiler, no creo que podamos estar mucho tiempo”.

Los comerciantes consultados solicitan al Cabildo que se abra un cruce para estudiantes a la altura de la Facultad de Ciencias Administrativas (calle Ricaurte) mientras se construye el paso elevado. (I)