El daño ambiental y a la salud causado por las detonaciones en las decenas de canteras que funcionan en la Vía a la Costa fue la denuncia que realizó Guillermo Ayala, presidente de la Federación de Urbanizaciones de este sector.

La queja la presentó durante una mesa de diálogo con el defensor del Pueblo, Freddy Carrión, en la que también escucharon otras denuncias de vulneraciones de derechos en los ámbitos de la educación y la salud.

Ayala expuso que existen leyes que regulan la correcta explotación de las canteras, las cuales no se cumplen. “Las leyes hablan, por ejemplo, de la remediación ambiental, pero los dueños de las canteras no han plantado un solo árbol y por eso las han clausurado”.

Esto último hace referencia al cierre por parte del Municipio de 29 canteras a lo largo de la vía a la Costa, el pasado 2 de enero. Entre los motivos de las clausuras estaban la falta de licencias ambientales, tasas de habilitación y otros documentos.

Añadió que esta actividad también provoca daños a la salud, pues las partículas que se levantan por las explosiones viajan con el aire hasta las urbanizaciones y estas generan problemas respiratorios a los residentes. 

Eliano Almeida, concesionario de una de las canteras cerradas, habló en defensa de la actividad. Aseguró que se estaba vulnerando el derecho al trabajo de decenas de empleados que “no tienen ni para la gasolina para la moto y mucho menos para comer”.

Negó rotundamente que el trabajo en las canteras perjudique a la salud o al medio ambiente, pues “las partículas que se desprenden son muy pesadas para viajar con el aire, todos los residuos se quedan en el lugar”.

El Defensor del Pueblo expresó que la institución era respetuosa de la competencia del Cabildo al ordenamiento de su territorio y por eso abogaría para que haya diálogo entre las partes para conseguir soluciones que satisfagan a ambas partes.

“Todos tenemos derecho al trabajo, pero indudablemente también a vivir en un ambiente sano”, afirmó. (I)