Los operativos de control de taxímetros efectuados por la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE) dejan un total de 400 choferes citados, entre abril y julio de este año, por no usar el dispositivo.

En la ciudad, la entidad estima que circulan 9.000 taxis formales. Es decir, solo el 4,4% de este parque automotor ha sido detenido por incumplir la Ley de Tránsito.

El art. 141 del estatuto multa con el 15% de la remuneración básica unificada ($ 51) y la reducción de 4,5 puntos en la licencia a quien no use el taxímetro las 24 horas.

Mientras que entre los usuarios del transporte no se percibe el cambio en cuanto a la disposición de los conductores para usar el aparato.

Algunos, como Mikaela Burbano, prefieren pactar la carrera de acuerdo a la distancia que se trasladan. Por ejemplo, desde el centro hasta la Floresta 1 “ofrezco pagar hasta $ 3, aunque me piden $ 4”.

Comentó que los choferes encienden el taxímetro para aparentar su uso cuando pasan cerca de un agente de la CTE.

A muchos usuarios para llegar a distintos puntos de la urbe, desde el centro, les cuesta entre $ 3 y $ 5. Otros, como Jorge Villamar, solicitan usar el taxímetro. La mayoría de los conductores, afirma, se muestra renuente a usarlo. “En ocasiones pasan de largo si uno les exige”, cuenta.

Los taxistas, por su parte, justifican su accionar en que la aplicación de la tarifa establecida por la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) les representa una pérdida económica.

Al ser consultado sobre que el uso del taxímetro no es al 100% en la urbe el director de la ANT, Héctor Solórzano, replicó que son los usuarios “los llamados a hacer respetar su derecho”.

En cuanto a las tarifas, aseguró, que aún son revisadas. Explica que los municipios a cargo del control de tránsito pueden acordar el precio del kilómetro recorrido con los taxistas.

La CTE informó que los controles han dado los resultados esperados y que se incrementarán.